Un recorrido a las 17 horas para alcanzar la meta de la redacción da para mucho a nada que alguien desafíe el protocolo consistorial y vaya cursando el camino entre sombras y sol constatando la crudeza de estas jornadas de ola de calor extremo. La habitualmente fresca -y hasta fría, y hasta tendente a las inundaciones de la calzada cuando los aguaceros arrecian- calle Teruel está desierta y desemboca en el termómetro de la farmacia Rufas. Ahí, a la sombra todo el día, 38 grados, que no es tontería (ver fotografías al pie de esta información).
En el tránsito, Víctor, amigo barbastrense y librero, me va relatando que un amigo suyo le ha comentado que en El Ariño el mercurio señala 49 grados en su coche, que obviamente es una barbaridad pero tampoco hay que restarle tanto. Pueden ser 44 o 45, vamos, la cocción del ternasco a baja temperatura. Hacia el centro de la ciudad, calle Cavia, junto a Gállego Martínez, un indicador también en la sombra: 41 º (constatar imagen abajo). Vamos superándonos. Y uno se acuerda del protocolo de calor.
La calle Zaragoza está calentita, pero aún queda lo mejor. La Plaza de Navarra. Ahí, en un acto de osadía, prácticamente de ardor -nunca mejor dicho- guerrero, nos aproximamos hasta la esquina de la Granja Anita con una canción que recuerda que hace calor. Y ahí la aparición (en la imagen): 44º del alta y debajo un anuncio de Ámbar con un consejo: Tómatela con tiempo. Y añadiríamos que a tiempo. Providencial. Hay que hidratarse.
La Plaza de Navarra está desierta, nadie osa hollar el centro, ni acercarse a las musas seguramente porque el agua es sopa. En los Porches, se agolpan unas poquitas personas en las mesas de los establecimientos abiertos.
Y llega el Coso Alto. Como un truco de magia, esta vía que hace poco más de una semana era una ebullición humana practica el arte de birlibirloque: nadie por aquí, nadie por allí. La explicación la da el marcador electrónico de la Farmacia Mingarro: 38 grados a la sombra. Sobrevivamos, agua, sombra y, si se puede, convivir con el aire acondicionado o los ventiladores. Salud.