Aínsa abre este fin de semana Follarasca, el escaparate de los productos locales y biodiversidad del territorio

Un ciclo de tres cortos documentales y un coloquio moderado por Jorge Molero novedad de la Feria de Otoño de los Pirineos

DH
31 de Octubre de 2024
Ambiente en la carpa del castillo de Aínsa en una anterior edición de Follarasca.

Follarasca, la Feria de Otoño de los Pirineos que se celebra en Aínsa, regresa al patio del Castillo el próximo sábado 2 de noviembre a partir de las 11.00 con productores locales, que superarán la veintena, talleres para público infantil y familiar, degustaciones y el III Concurso Monográfico de Gallina de Sobrarbe.

La Feria cumple cinco años de trayectoria y este año, como novedad, abrirá la programación este viernes la proyección de tres cortos documentales sobre el sector primario y un coloquio posterior moderado por Jorge Molero, coordinador técnico de la Red de Municipios por la Agroecología. La cita es a las 19.30 en el Centro Cultural.

“Este año le hemos dado un nuevo impulso a Follarasca con una tarde dedicada a la proyección de trabajos cuyas temáticas tienen mucho que ver con esta feria. Agricultura, emergencia climática y la importancia del pequeño comercio son asuntos que abordaremos en profundidad, además muy bien acompañados por nuestro amigo Jorge Molero, de la Red de Municipios por la Agroecología, en la que Aínsa ostenta la presidencia”, explica la concejala y coordinadora de la Feria, Susana Pérez.

Los títulos elegidos han sido Revivir el campo, Pequeñeces y La Caravana libre de tóxicos. Además, tendrá lugar la presentación de la 'Aldea 0', un prototipo de aldea del siglo XXI que tiene como función esencial la gestión agroecológica del territorio. Al finalizar, los asistentes tendrán ocasión de participar en una degustación de productos agroalimentarios de la comarca de Sobrarbe.

El sábado, el centro de actividad se traslada a la Villa Medieval, concretamente a la carpa instalada en el patio del Castillo. Más de una veintena de productores locales, entre los que se encuentran artesanos de la miel, la mermelada, las manzanas, el queso o la carne, se darán cita allí a partir de las 11.00. A las 12.00 está previsto un taller sobre limpieza sana del hogar, impartido por 'Medicina para el alma' donde se enseñará a preparar productos más respetuosos con el medio ambiente y con la salud de las personas.

Por la tarde, el protagonismo lo acapararán los responsables del Huerto Escolar Ecológico y las niñas y niños del Consejo de Infancia y Juventud municipales, ya que, como en ediciones anteriores, habrá un taller de fabricación de cuerdas para toda la familia y otro de juguetes e instrumentos musicales que finalizarán con la degustación de una merienda saludable, preparada por las consejeras y consejeros del municipio.

“Durante todo el día podremos ver cómo se elabora el zumo de manzana con demostraciones que ya son tradición de esta feria, y la exposición de material apícola, un sector al alza en Sobrarbe al que queremos seguir dando toda la visibilidad posible”, añade Susana Pérez. “Y otra invitada que ha llegado para quedarse es la Gallina de Sobrarbe, con un plus de promoción gracias al tercer concurso monográfico, organizado por Agasob, a quienes agradecemos enormemente el trabajo que realizan para la conservación y puesta en valor de la Gallina de Sobrarbe”, concluye la coordinadora.

Follarasca lleva celebrándose en Aínsa desde 2019 dentro del ya finalizado proyecto de cooperación Pro-Sobrarbe, que se desarrolló entre 2019 y 2022. Estaba integrado por la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ), la asociación de hortelanos Arto-Un Paso Atrás, Turismo Verde Huesca, la Asociación Altoaragonesa de Selección de la Abeja Negra (ASAN), la Universidad de Zaragoza y el Ayuntamiento de Aínsa-Sobrarbe.

El grupo sigue manteniendo reuniones periódicas y sacando adelante una feria cuya motivación original se enfocaba en mejorar la competitividad y viabilidad económica de las explotaciones apícolas y agrícolas. Actualmente, Follarasca da cabida a emprendedores locales del sector primario y pone en valor métodos de trabajo tradicionales, sumándose al calendario festivo de Aínsa y convirtiéndose en cita habitual del otoño, “una iniciativa” - argumenta la concejala - “que sirve de excelente escaparate de productos al mismo tiempo que traslada al público la rica biodiversidad del territorio”. 

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