La afluencia de visitantes al Pirineo ha provocado importantes retenciones en la zona final de la A-23 en Lanave la tarde de este viernes.
El Pirineo recibe este fin de semana de julio la visita de numerosos turistas que se han encontrado con las habituales retenciones en periodos festivos en el punto en que finaliza la autovía, el tramo pendiente entre Lanave y Sabiñánigo, en la cara norte de Monrepós.
Las retenciones de varios kilómetros se han comenzado a producir sobre las 19 horas en este cuello de botella en la N-330 y se han prolongado durante unas dos horas.
Recientemente, el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible anunció la adjudicación por 102,4 millones de euros de las obras de los tramos Lanave-embalse de Jabarrella y embalse de Jabarrella-Sabiñánigo Sur de la A-23. El Gobierno de Aragón ya reclamó al ministro Óscar Puente acelerar los plazos de esta obra, que tiene una previsión de tres años hasta su finalización.