El Ayuntamiento de Huesca desarrolla de forma subsidiaria trabajos para consolidar la estructura de los números 14 y 16 de la calle de San Orencio. Ha contratado una empresa para llevar a cabo estas tareas, que tienen por objetivo evitar el colapso del edificio. La adjudicación se llevó a cabo por 41.441 euros, que posteriormente se repercutirán en la propiedad.
Según el proyecto de ejecución, a partir de los objetivos establecidos por los servicios técnicos del Ayuntamiento, “la situación general de ambos inmuebles es de abandono total, con acumulación de escombros, excrementos de palomas y aves muertas y otros excrementos posiblemente humanos”. Ambos inmuebles, que comparten acceso general pero son dos edificios independientes, tienen varias zonas en ruina inminente, tanto escaleras como algunos forjados.
“Desde el punto de vista de la seguridad estructural, existe riesgo inminente de hundimiento”, señala el proyecto. En general, los trabajos consisten en establecer medidas de apeo o de apuntalamiento de la estructura, “mediante la creación de un armazón o estructura anexa a la existente”. Se ha vallado además la zona y se aplicarán mallas o redes que impidan la entrada de aves. Los trabajos incluyen la demolición de partes, zonas o estructuras para garantizar la estabilidad de los edificios.
Para realizar esta intervención, el Consistorio tuvo que esperar a una orden judicial de desalojo que permitiera ejecutar subsidiariamente estas obras. Además, en octubre pasado se procedió al desalojo de una familia que mantenía okupada una parte de la finca del número 16. El pasado mes de junio, la Alcaldía emitió un decreto de realización subsidiaria de obras de mantenimiento en el inmueble, a la espera de las autorizaciones judiciales para desalojo y acceso a los edificios.
Posteriormente, se tramitaron las solicitudes a la autoridad judicial y se encargó el proyecto de ejecución de los trabajos. Finalmente, se licitó la obra para que una contratista llevara a cabo los trabajos que están en curso.