El Castillo de Corvinos, entre los 18 inmuebles de España beneficiarios de un programa de rehabilitación y promoción turística

Tras su rehabilitación, este inmueble ubicado en Albero Alto abrió en 2022 como destino turístico y ahora recibe una ayuda de la Fundación de Casas Históricas y Singulares de España con Airbnb

Periodista
21 de Julio de 2024
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EEl Castillo de Corvinos, beneficiario de un programa de rehabilitación y promoción turística.
EEl Castillo de Corvinos, beneficiario de un programa de rehabilitación y promoción turística.

El Castillo Palacio de Corvinos de Albero Alto ha sido uno de los 18 inmuebles de España que se benefician del Programa de Rehabilitación y Promoción Turística de la Fundación de Casas Históricas y Singulares de España, desarrollado con el apoyo de Airbnb. Este plan cuenta con un montante de en torno a un millón de euros que se reparten entre los 18 candidatos seleccionados de los 156 que concurrieron al programa. Esta semana se ha celebrado un acto de la fundación en la Universidad CEU San Pablo, para la entrega del 25 % de las ayudas.

En esa cita participó Borja Goyeneche, actualmente al frente de este legado familiar que ha abierto sus puertas al turismo, convirtiéndose en una singular y acogedora casa rural a 10 minutos de la capital oscense. A este programa presentó varios proyectos para continuar mejorando el histórico castillo que en los últimos años ha sido recuperado de la casi ruina para convertirse en alojamiento desde 2022.  

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La historia del Castillo Palacio de Corvinos ubicado entre Monflorite y Albero Alto es digna de conocerse. Borja Goyeneche apunta algunos rasgos, como que fue levantado en el s. IX como fortaleza musulmana y en el s. XI fue conquistada por el rey Sancho Ramírez para establecer, junto con el Castillo de Montearagón, un lugar estratégico entre Huesca y Zaragoza.

Borja Goyeneche durante la entrega en un acto celebrado en la CUIE
Borja Goyeneche durante la entrega en un acto celebrado en la Universidad CEU San Pablo.

En el s. XV fue reconstruido sobre sus cimientos y se convirtió en un palacio de propiedad señorial e integró parte de la iglesia. El origen de la propiedad era de la familia Otal y posteriormente, Goyeneche, y han pasado muchas generaciones y años en los que el inmueble llegó a estar casi en estado de ruina. “No se podía utilizar ni como vivienda por el riesgo de derrumbe y llegó a usarse como almacén agrícola”, al estar rodeado de campos de trigo, cereal y cebada.

Hace 13 años comenzamos el proceso de rehabilitación y poco menos que de reconstrucción, con actuaciones primero en la fachada y tejado y luego en el interior”, explica Borja Goyeneche. “Trabajamos con contratistas de la zona siguiendo el proyecto de un arquitecto especialista en patrimonio y con el interés de conservar todos los elementos originales que fuera posible”, agrega.

Hace siete años que finalizó la obra y dos desde que se pudo abrir como alojamiento de turismo rural. “Desde el principio pensamos en convertirlo en destino turístico”, aunque circunstancias familiares, con los hermanos Goyeneche viviendo en distintos partes del mundo, retrasaron el proyecto. Borja regresó de Buenos Aires y está al frente del establecimiento. Tras obtener todas las licencias, finalmente pudieron inaugurar en 2022.

El Castillo Palacio de Corvinos cuenta con siete habitaciones, una de ellas ubicada en la antigua capilla de la edificación, y desde el primer momento ha tenido muy buena acogida. “La demanda es ahora muy muy buena. Nos ha sorprendido la cantidad de extranjeros que vienen, que incluso supera al turismo nacional. Ingleses, franceses…, pero también de fuera de Europa, japoneses, estadounidenses, chilenos…”, detalla.

Esta afluencia se debe, apunta Goyeneche, a que “es un edificio y un alojamiento distinto, en un entorno natural, pero con la ventaja de estar a diez minutos del centro de Huesca, donde hay acceso a toda la oferta de restauración. Quienes acuden pasan varios días y ya han planificado, y si no les ayudamos, visitas como a la zona de Loarre, Alquézar y por supuesto al Pirineo. No sólo tienen preferencia por actividades deportivas, también hay mucho interés en otras propuestas de la provincia, como el románico”, explica Borja Goyeneche.

Ahora disponen de un aliciente para continuar trabajando en el edificio. Airbnb puso en marcha hace varios años esta ayuda para rehabilitar casas históricas en Francia, en Italia y en 2022 en España, a través de la Fundación de Casas Históricas y Singulares de España. “Presentamos proyectos con distintas actuaciones. La principal rehabilitación ya está realizada, pero seguimos haciendo trabajos”, como la actuación en un edificio anexo para poder contar con más habitaciones para personal; la apertura de una puerta en la contrafachada que da a un parque; instalar señalización en la carretera y la iluminación exterior que llama mucho la atención.

El buen hacer de la familia Goyeneche ha permitido que el Castillo Palacio Corvinos fuera una de las 18 casas singulares de España seleccionadas entre todas las candidatas para poder seguir difundiendo su historia y generar economía en este espacio rural de la provincia de Huesca.

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