Bajo el lema “La vivienda es un derecho, no un negocio” se ha llevado a cabo en Huesca una concentración en la que se ha reclamado la aplicación de la Ley de Vivienda, que contiene “herramientas para empezar a enfrentar la situación” ante una “necesidad social”.
La concentración, siguiendo una convocatoria nacional y que en la provincia también se ha celebrado en Benasque, ha sido impulsada en Huesca por la Plataforma Ciudadana de Vivienda y ha reunido a un grupo de oscenses junto al solar entre la calle Ramiro el Monje y el Coso Bajo, donde han colocado la pancarta reivindicativa, acompañada de otros lemas como “ni casas sin gente ni gente sin casas”, “por la vivienda, contra la especulación, regular la utilización del suelo”, “vivienda pública de alquiler” y “el alquiler me mata”. Asimismo, se ha repartido información entre quienes han pasado por la zona.
“Salimos a la calle porque hay herramientas, hay necesidades sociales, la ley nos ampara y la gente está interesada en lo que queremos plantear y ofrecer”, ha señalado César Torres, portavoz de la Plataforma Ciudadana de Vivienda en Huesca.
Se ha referido a que se trata de un problema mundial y Huesca no es ajena, “pero pensamos -ha reclamado- que hay herramientas legales suficientes que podemos utilizar y no se nos permite”, entre las que ha citado las transferencias de fondos desde el Gobierno central a las comunidades, “que se están usando mal, como en los alquileres para jóvenes”.
Ha agregado Torres a otras medidas contenidas en la Ley de Vivienda sobre zonas tensionadas, que permitiría “verificar la gravedad del problema y acceder a otras herramientas que existen sobre seleccionar los colectivos que son más vulnerables. Los pensionistas, por ejemplo, no pueden acceder y los jóvenes, muchísimo menos. El mercado se va quedando solamente para gente que tiene mucho mucho dinero. Pensamos que hay herramientas legales suficientes como para comenzar a enfrentar esta situación”, ha añadido.
Ha afirmado el portavoz de la plataforma que en Huesca se podría avanzar en este aspecto de las zonas tensionadas, “una herramienta muy clara en la Ley de Vivienda, lo que nos permitiría identificar en qué zonas se podría trabajar y con qué colectivos, y abrir una discusión sobre el tema de la vivienda en Huesca: la infravivienda, las viviendas vacías… Nos gustaría colocar todo esto sobre la mesa”, ha señalado Torres.
Ha citado que el Ayuntamiento de Huesca tiene, según el último inventario municipal de 2018, 30 solares vacíos. Ha preguntado por qué otros ayuntamientos están haciendo vivienda, “por ejemplo, el de Madrid, que acaba de firmar con el Gobierno central un proyecto para 10.000, y aquí dicen que los ayuntamientos no pueden, y son los dos del PP”. “¿No pueden hace o no quieren hacer? -ha cuestionado-. Nosotros pensamos que se pueden hacer, pero para eso necesitamos cifras fiables de la situación en la ciudad y para eso necesitamos aplicar la Ley de Vivienda”.
Torres se ha referido al interés en que el Ayuntamiento publique el inventario municipal de bienes, “porque son espacios públicos, a los cuales más fácilmente se podría acceder para construir vivienda social, para generar alquiler social o alquiler orientado a los jóvenes, un colectivo que está muy poco ayudado. Solo se ha publicado una parte ínfima de ese inventario y por eso sabemos que hay 30 solares”.
También ha apostado por que “todas las viviendas que están destinadas a asociaciones se cambiaran, es decir, que las asociaciones tuvieran instalaciones de oficina y las viviendas se dedicaran a familias”.
“Debería mostrarse más eficiencia en el uso de las instalaciones públicas y por eso hemos remitido al ayuntamiento varias veces cartas con esta información, solicitando una reunión, pero hasta ahora el silencio ha sido la respuesta”, ha lamentado.