Matronas del Hospital Universitario San Jorge de Huesca atribuyen a la Dirección de Enfermería del Hospital Universitario San Jorge de Huesca el "desmantelamiento" de la unidad de matronas, cuyas plazas pendientes de cubrir van a ser ocupadas por enfermeras generalistas.
Según explican, en el año 2019, "tras un arduo camino, se consiguió la reconversión de las plazas de la planta de maternidad del hospital, pasando a ser cubiertas por enfermeras especialistas en obstetricia y ginecología (matronas)".
Agregan que esto supuso un hito en la mejora de la calidad de los cuidados, y el San Jorge fue de los primeros hospitales en España, donde se produjo este cambio. "Desde el momento en el que tuvo lugar la reconversión, las matronas venimos reivindicado la necesidad de dos puestos más de matrona en plantilla orgánica -destacan-. Esto facilitaría la gestión del personal y la cobertura de incidencias ante la falta de matronas en bolsa que estamos viviendo en estos momentos".
Sin embargo, estiman que "la mala gestión del personal" ha llevado a este personal a "una situación insostenible" que la dirección ha decidido solventar "sacrificando la organización de la Unidad de Enfermería Obstétrico-Ginecológica".
Recientemente, las matronas se reunieron con la Dirección de Enfermería, que les trasladó la "decisión firme" de contratar personal de enfermería, sin la especialidad de matrona, para cubrir estos turnos.
Las matronas comentan que, como medida temporal, se ofrecieron a cubrir ellas mismas esas incidencias en iguales condiciones en las que se cubren las que se producen en el resto de los servicios, a lo que la dirección no accedió.
En opinión de estas matronas, la medida va a conllevar "un retroceso en la calidad de los cuidados proporcionados por enfermeras especialistas y va a suponer un paso atrás en el desarrollo de la enfermería que, en la búsqueda de la excelencia de los cuidados, aboga por la especialización y su desarrollo como futuro de la profesión".
Asimismo, estiman que las mujeres embarazadas y las familias verán comprometida la calidad de la asistencia puesto que las matronas no las pondrán acompañar, como venían haciendo tras la reconversión, en los ingresos por preparto en la planta, en las inducciones del trabajo de parto, ni apoyar las lactancias maternas, atender las urgencias o acompañar y asistir a las mujeres en los procesos de pérdidas gestacionales.
La evidencia científica a día de hoy corrobora la mejora en la satisfacción, calidad de la asistencia y disminución de las tasas de morbimortalidad materno infantil en la asistencia prestada por matronas.
"Los que somos conocedores del sistema sanitario desde dentro, nos damos cuenta de que hay determinadas medidas de ahorro que implicarían a otros estamentos u hospitales del sector, que nunca se van a llevar a cabo, recayendo siempre el sacrificio sobre la calidad de los cuidados, que al parecer es lo que menos importa y lo que más barato sale", concluyen.