Despedida del general de División Vivas Urieta: "Vuestra cohesión y unidad os hará invencibles"

El militar jaqués ha pronunciado una emotiva alocución cargada de gratitud y de apelaciones al compañerismo de una "religión de hombres honrados"

DH
19 de Diciembre de 2024
Homenaje a los Caídos en Huesca presidido por el general Vivas

Con la renovación del juramento a la Bandera, se ha despedido el general de División José Manuel Vivas Urieta, Jefe de la División Castillejos en el Acuartelamiento “Sancho Ramírez” de Huesca tras su pase a la Reserva, dejando como legado una extraordinaria hoja de servicios en la que ha ejercido en la Compañía de Esquiadores Escaladores 51, Escuela Militar de Montaña y Operaciones Especiales, Jefe del IV Batallón de Intervención de la Unidad Militar de Emergencias, Jefe de Estado Mayor de la Unidad Militar de Emergencias,
Jefe de Operaciones del Mando de Operaciones, Director de Integración de Funciones Logísticas y Jefe de la División Castillejos.

Emotividad en una ceremonia en la que han participado el Regimiento de Transmisiones 1 y el Batallón de Cuartel General, Unidades ubicadas en la ciudad de Huesca y una nutrida representación de las principales autoridades civiles, con la alcaldesa de Huesca a la cabeza.

El general de División Vivas Urieta ha expresado su gratitud, la lealtad y el apoyo de los subordinados del Acuartelamiento Sancho Ramirez, mandos y tropa del CG, RT1, BCG y USAC, a los que ha mandado en la recta final de su larga carrera en la milicia que empezó como cadete de la XLII Promoción en la Academia General Militar.

Ha reconocido la colaboración y apoyo que siempre ha encontrado en las Autoridades de Huesca. Apoyo y Colaboración del Ayuntamiento, de la Subdelegación del Gobierno, de la Subdelegación de Defensa, de la Delegación Territorial del Gobierno de Aragón, de la Diputación Provincial, de la Comandancia de la Guardia Civil, de la Policía Nacional, en general de todas las instituciones y de sus máximos responsables.

De hecho, ha asegurado que sus últimas palabras "no son un mero formulismo: Queridos amigos, porque en verdad así os considero a todos, como AMIGOS. Muchas gracias a todos, de corazón por acompañarme en este día en el que he renovado mi juramento a la Bandera, como despedida tras 42 años de servicio activo, al encontrarme muy próximo a mi pase a la situación de reserva".

Ha admitido que este momento está siendo "particularmente emotivo y entrañable, al tener lugar en el acuartelamiento Sancho Ramirez de Huesca, en mi tierra, y ante vosotros, amigos de Huesca y provincia, y también amigos llegados de bastante más lejos como los representantes de la Agrupación Nacional de Legionarios de Honor, que habéis venido expresamente desde Málaga, Gracias".

Tras el capítulo de gratitud, que ha cerrado con la "inmensa a mi familia, a mi mujer y a mis hijos, que me han apoyado en todo lo que ha demandado la carrera o he solicitado por propia voluntad", ha apelado al sentimiento que va dirigido a los que visten el uniforme militar. "Queridos compañeros: estad muy orgullosos de lo que sois. Como dice el verso de Calderón formáis parte de una religión de hombres honrados. Ejercéis la mejor profesión que se puede tener, la que exige el máximo sacrificio en defensa de nuestros compatriotas. Sois soldados. Sois guerreros. Una profesión antigua y respetada. Seguid cultivando los valores militares: la lealtad, la disciplina, la abnegación, el valor y sobre todo el compañerismo. Sed siempre buenos compañeros. El compañerismo cohesiona las Unidades y las convierte en una hermandad. Sois hermanos de armas. Vuestra cohesión y unidad os hará invencibles".

Ha terminado su discurso deseando lo mejor a todos los presentes para que sus esfuerzos se vean recompensados con éxito "y ya que estamos muy próximos a la celebración del nacimiento de Jesucristo, la Navidad, os deseo que paséis todos una muy Feliz Navidad en compañía de vuestros seres queridos". Antes del solemne acto de homenaje a los caídos por España, ha pronunciado sus últimos vivas a España, el Rey, la División Castillejos con el mismo brío que a lo largo de toda su carrera.