Mariona estaba conociendo a través del programa de Jesús Calleja “Volando voy” la historia de unos emprendedores rurales y algo se le removió por dentro que hizo despertar un sueño de vida. Poco después, ya se había trasladado con su familia desde Barcelona a Peraltilla para reabrir el hotel de turismo rural "Delicias" y crear su restaurante “Ona by Delicias”, que este miércoles abren sus puertas.
Mariona Sánchez Puerto es educadora social y técnica en animación sociocultural y turística y su marido, Mok Aouach, entrenador personal. Ambos tenían trabajos fijos y una estabilidad en Barcelona, pero su vida ha dado un giro. “Acababa de ser madre por segunda vez y estaba viendo en la televisión a personas que lo habían dejado todo para irse a un pueblo. Sin decirle nada a mi marido, me puse a buscar en internet “repoblación de pueblos” y encontré Peraltilla, el único que incluía una oferta laboral”, recuerda Mariona.
Siguía sin comentar nada a su familia cuando se puso en contacto con el alcalde, José Pedro Sierra, y después le dijo a su marido que le apetecía hacer una excursión. “Le lié y en dos horas y media estábamos en Peraltilla”, narra. Ya en el pueblo se lo contó: “Le expliqué: ha salido esto. Es mi sueño de toda la vida, un hotelito rural y un bar restaurante pequeño, y me dijo que sí, que íbamos a perseguir mi sueño”, comparte.
También se había unido otra circunstancia que está en el fondo de la decisión. Su hija recién nacida había estado ingresada doce días en la UCI. “Comencé a pensar en las horas de trabajo que hacíamos y que al final no te permiten tener tiempo para estar con tus hijos, los tienes que dejar en la guardería o a familiares para que los cuiden. No quería ese tipo de vida, deseaba algo fuera de las rutinas establecidas”, explica Mariona.
En un par de semanas, “con todas las ganas e ilusión”, Mariona, Mok y sus hijos, Naïm y Aya, lo dejaron todo atrás y comenzaron a arreglar lo que va a ser su nuevo espacio de vida, un hotel rural de cuatro apartamentos y dos habitaciones y su restaurante kilómetro cero que han llamado “Ona by Delicias”.
En Peraltilla la acogida ha sido inmejorable. Realizaron una pequeña inauguración del local para invitar a todos los vecinos “y poder conocerlos y llamarles por su nombre. Somos 200 -remarca Mariona-, el mismo número de vecinos que en mi bloque de Premiá”. Así tuvieron también la oportunidad de descubrir la mano que tiene Mariona en la cocina y quedaron gratamente sorprendidos, sobre todo con la tarta que preparó.
“Siempre me ha encantado la cocina, especialmente la repostería. Trabajaba en gestión de eventos y restaurante en hoteles y necesitaba algo para mí, que lo que haga sea para nosotros”, comenta. Su idea es ofrecer desde desayunos de cuchara, carrilleras a baja temperatura, rabo de toro, albóndigas, brasa… Y también más tipo tapas, como berenjenas crujientes, patatas bravas con salsa casera, hamburguesas gourmet y pizzas caseras, entre otras propuestas. No puede faltar el lado dulce de los postres, gofres y crepes caseras. Además, Mariona está contenta porque ha podido poner terraza frente al Ayuntamiento, donde -como describe- se podrá disfrutar de sus especialidades, en un espacio tranquilo, escuchando música.
Su vertiente de animadora cultural también ha llevado a Mariona a realizar novedosas propuestas, con diferentes juegos para los niños, y también un sorprendente escape rural en el que propone que, tras una jornada de turismo por la zona, los visitantes encuentren también en Peraltilla diversión para sus hijos e hijas o para toda la familia recorriendo el pueblo siguiendo pistas, buscando objetos escondidos, solucionando acertijos…
“Queremos innovar, crear, ofrecer algo diferente, darle vida a Peraltilla”, declara Mariona. Y así cambiar la primera impresión que se llevó Mok al llegar a la localidad: "No hay nadie, está vacío", le dijo, mientras Mariola estaba encantada: "Soy de pueblo, me gusta mucho la tranqulidad", explica.
Asimismo, a quienes se alojen en el hotel de turismo, Mok ofrecerá sus servicios de entrenador personal con diversas propuestas de sesiones de ejercicios.
En la localidad están muy contentos con la llegada de la familia y especialmente encantados con Naïm y Aya llenando de vida sus calles. “Y nosotros -traslada- queremos criar aquí a nuestros hijos, que los conozcan, que puedan salir a jugar sin miedo… hacer las cosas distintas”.
Para el alcalde de Peraltilla, José Pedro Sierra, la llegada de esta familia al pueblo es doblemente satisfactoria. “Por una parte, son gente joven con ilusión y ganas de trabajar en el medio rural. Y, por otra, el volver a tener las puertas abiertas y renovadas tanto del restaurante como del hotel rural, va a suponer tener un punto de encuentro más de la gente de la localidad. Ona y Mok, junto a sus dos hijos pequeños, han sido muy bien recibidos”, confirma.
Sierra remarca que “esta pareja de jóvenes son una muestra más de que vivir en el medio rural es una opción de vida buena, sana y completa. Si los ayuntamientos les damos una oportunidad -señala-, el medio rural volverá a atraer a la gente y no solo de visita o de turismo”.