La vuelta del invierno esta primavera ha dejado en la provincia de Huesca este sábado granizo, nieve, fuertes vientos y lluvia.
En Los Monegros, una fuerte granizada con el centro en Alberuela de Tubo ha afectado también a Poleñino, Curbe y Sodeto, entre otros puntos, donde ha dejado daños que oscilan entre el 20 y el 50 por ciento en algunos campos, como se ha apreciado en una primera valoración.
El pedrisco ha caído con bastante fuerza y grosor sobre las 15.30 horas y ha afectado a la cebada, trigo y guisante verde, en un momento en que los cultivos están verdes y las plantas son muy endebles y se doblan. Algunas espigas se han quedado sin grano y otras dobladas, por lo que podrían acabar secándose si se corta la savia.
Especialmente ha afectado al guisante verde, destinado para congelar, una planta que se hace en poco tiempo y es muy tierna, por lo que esta gran tormenta acompañada por pedrisco la ha aplastado. Ahora se encontraba en el momento previo a la foración, abultaba bien, pero se ha cortado en un momento vital para el cuajado. Que se recupere será muy difícil.
Asimismo, en Sobrarbe, Ribagorza y Somontano, donde también ha afectado a cultivos, se han registrado por la tarde fuertes granizadas que han sorprendido a los conductores, por ejemplo, en la vía entre Aínsa y El Grado, donde la carretera parecía nevada. El granizo ha llegado también a otros puntos de la provincia, como la capital oscense. Tanto el Pirineo como el centro de Huesca estaban en aviso amarillo por tormentas hasta las 20 horas. La nieve también ha vuelto al Pirineo, donde la cota ha descendido de los 1.600 metros.
Según los datos recogidos por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la precipitación más abundante en la provincia, y también de los puntos donde más ha llovido de España, ha sido Seira, con 56 litros por metro cuadrado recogidos hasta las 17 horas. También han destacado las precipitaciones registradas en Formigal, con cerca de 42 litros; Benasque, con 40; y Bielsa, con 39. Las lluvias han provocado crecidas en río, como el Usia en La Fueva.
Ante la previsión de lluvia, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha intensificado la vigilancia en el Pirineo y Prepirineo durante este sábado y ha recordado la posibilidad de “crecidas súbitas importantes de carácter local en barrancos y cauces menores" en Huesca, "principalmente en aquellas áreas donde descarguen los chubascos más intensos”, ha indicado.
El viento ha soplado con especial intensidad en Cerler, con 103 kilómetros hora, y ha registrado la racha máxima de todo el país, de 145 kilómetros por hora. En Panticosa la velocidad máxima ha sido de 58 kilómetros hora, con una racha de 109.
Las temperaturas se han situado bajo cero en Astún, con -1,9 grados la tarde de este sábado y -1,5 en Cerler.