Una furgoneta de panadería que llevaba la puerta de atrás abierta ha perdido una parte de la mercancía esta mañana cuando entraba en una de las rotondas de la avenida de los Danzantes, lo que ha provocado la curiosidad de los coches que circulaban.
Al menos dos grandes cajas se han caído a la vía y los panes de pueblo redondos se han desperdigado por la calzada justo a la entrada de la rotonda.
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En estos casos, siempre hay buena gente que procura ordenar la circulación para la recogida de los productos, y el nombre de la reputada panadería ayuda lo suyo, con lo que ha sido cuestión de pocos minutos que todo estuviera impoluto... salvo los panes, claro.