Ganaderos han denunciado un nuevo ataque del oso en Hecho, con tres ovejas muertas y otras tres heridas, que “no se van a salvar”, aseguran.
El ataque se ha producido la noche del lunes al martes en el monte del Barcal en los Valles Occidentales, y según apunta el ganadero Domingo Laplaza, los guardas forestales han confirmado que ha sido el oso y en la zona se ha podido comprobar su rastro.
“Tres han muerto en el acto y otras tres están heridas de muerte, -señala- además de que todo el rebaño ha quedado desperdigado” y los ganaderos que están en la zona han estado trabajando para volver a reagruparlo.
Así, esta noche han perdido seis ovejas, y asegura Laplaza que cada vez que cuentan el rebaño, formado por unas 2.400 cabezas, echan en falta decenas. “Hace unos días nos faltaban 54, aunque puede haber alguna viva por el monte, y el lunes, unas 33 más”, afirma Laplaza.
Considera que el oso esloveno introducido en el Pirineo “es muy carnívoro. El autóctono nos tenía acostumbrados a que matara una o dos ovejas en primavera, mientras que el verano era tranquilo hasta el otoño, antes de hibernar”, señala. “Ahora es todos lo días matando ovejas sin parar. En el monte hay otros dos ganaderos y ahora están tranquilos porque nos está atacando a nosotros, al inicio fueron ellos los que lo sufrieron”, señala.
Entiende Laplaza que la solución es que “saquen al oso y se lo lleven a otro sitio”. “La administración no nos ayuda en nada”, contesta al Gobierno de Aragón, después de que el director general de Medio Natural, Alfonso Calvo, detallara las medidas que están adoptando desde el Departamento de Medio Ambiente, que incluye algunas peventivas como la instalación próximamente de un vallado doble, la mejora de los accesos a los montes y también de los refugios y el aumento de superficie de pastos, con desbroces y quemas controladas, entre otras, además de las compensatorias por la muerte de ovejas en ataques de oso.
Domingo Laplaza insiste en “una solución rápida” porque “la oveja va a desparecer”. Como señala, “así no podemos estar. Te hace llorar ver ovejas con las tripas colgando o el pecho abierto y vivas. Y hablan del bienestar animal...”.
Los ganaderos todavía tienen que pasar en los montes entre Ansó y Hecho el mes de septiembre. “Pero creo que no vamos a poder llegar hasta octubre”, afirma.