Las intensas precipitaciones que cayeron este viernes en la provincia de Huesca han obligado a soltar agua del embalse de Arguis para mantener el nivel hidrogrñafico dentro del límite de seguridad y eso ha provocado una crecida del río Isuela a su paso por la capital altoaragonesa y su desbodamiento en algunas zonas como las Fuentes de Marcelo.
Además de anegar tierras y algunos tramos de carretera, el caudal se ha llevado por delante la pasarela peatonal que fue repuesta el pasado mes de julio al encontrarse muy deteriorada.
Numerosas personas se encontraban paseando por este paraje natural de la capital oscense cuando se han visto sorprendidos por la crecida y algunos se han dado la vuelta muy asustados. "Realmente daba miedo, me he ido volando", afirma Mayte.
Por otro lado, los Bomberos de Huesca tuvieron que intervenir en el entorno del Hospital Provincial, donde se habían desplomado dos árboles, y para retirar el agua que había inundado la Calle del Parque.
El viernes, a las 17:00 horas, el cielo se cubrió de nubes cargadas de agua que pronto comenzaron a descargar con fuerza sobre la ciudad y buena parte de la provincia. La virulencia de las precipitaciones alcanzó su punto álgido a las 18:00.
Según los datos proporcionados por la estación meteorológica Huesca-Pirineos, la cantidad de lluvia acumulada en 24 horas ascendió a 25.2 litros por metro cuadrado, siendo el máximo de precipitación acumulada en un lapso de 60 minutos de 10.4 litros por metro cuadrado.
La temperatura media registrada durante el día fue de 11.81°C, con mínimas de 6.3°C y máximas de 18.3°C. Por otro lado, el viento sopló con una velocidad media de 3.68 metros por segundo (equivalente a 13.25 kilómetros por hora), predominando la dirección Sureste, aunque se registraron ráfagas máximas de hasta 14.1 metros por segundo (50.76 kilómetros por hora), lo que contribuyó a intensificar la sensación de adversidad climática.