Jaca se ha vestido las mejores galas de sus grandes acontecimientos tradicionales para recibir como merecen a los Reyes Magos de Oriente, en toda una exhibición de luces, de colores y de música navideñas.
Desde las 18:30 horas, los jaqueses y muchos visitantes han recibido entusiasmados a los hombres sabios en la Plaza de Elche, donde han llegado con buen ánimo en una tarde nada estridente en lo climatológico. Han recorrido la Avenida Primer Viernes de Mayo y luego la Avenida de Francia, para llegar a la Avenida Juan XXIII y, a continuación, al Palacio de Congresos.
El desfile ha sido un gozo para la vista, con las carrozas reales acompañadas de figurantes que simbolizan la nieve, la pureza y la levedad, con unas preciosas libélulas y seres trascendentales.
En el gran centro de la palabra y de la búsqueda de la verdad, Melchor, Gaspar y Baltasar han sido extraordinariamente complacientes con los niños que se han acercado a comprobar que la magia se puede llegar a tocar, que tiene rostro amable y gestos de amor a la humanidad, en la que los pequeños son eje nuclear.
Por ser afables, incluso los Magos de Oriente se han comprometido con velar sus sueños para que, cuando despierten el 6 de enero, la fecha más bonita del año, los encuentres plasmados en la realidad de los cuartos de estar de sus hogares. De ilusión se vive.