José Luis Bergua ha presentado este lunes su dimisión como concejal del Ayuntamiento de Aínsa tras 9 años en el Ayuntamiento, a los que suma otros cargos en distintos organismos, en total 12 años dedicados a lo público.
Bergua califica esta etapa de muy intensa y, como señala, “he trabajado, conocido y aprendido de muchísimas personas, muchas de ellas con las que ahora comparto una gran amistad. Nunca me ha importado "echar horas", pero el cansancio y agotamiento y la tensión de conjugar responsabilidades -explica-, siempre lo he llevado peor. Para lo público hay que tener una gran fortaleza mental y me temo que estos últimos meses he llegado al límite de mis fuerzas”.
“Creo sinceramente -traslada en sus redes sociales- que ya no voy a poder seguir trabajando como hasta la fecha, y tanto a nivel personal como para el organismo que represento, lo mejor es dejar paso a otra persona”.
José Luis Bergua ha sido cuatro años teniente de alcalde en el Ayuntamiento de Aínsa, además de ser tres años consejero de la Comarca de Sobrarbe, dos de ellos en el puesto de vicepresidente. También ha sido vicepresidente del Cedesor, ha participado ocho años en la Junta Directiva del Patronato del Parque Natural de la Sierra de Guara, cuatro de ellos como presidente, y ocho años también en el Patronato del Parque Natural del Río Vero. Asimismo, presidió tres años la entidad de empresarios de Sobrarbe.
“Sé que no se lo dejo fácil a la persona que me sustituya, todos los ayuntamientos y en especial el nuestro, con 25 pueblos y el "problema" añadido de contar con unos de los pueblos más turísticos de Aragon, no son nada fácil de gestionar. La cercanía a nuestros vecinos y vecinas hace que la implicación tenga que ser fuerte”, por lo que agradece a quien le sustituya que dé el paso. “Siento que sea así, pero seguro que podrá hacerlo mejor de lo que yo podría hacerlo en mi situación actual”, apunta.
En su despedida, agradece a todo el personal del Ayuntamiento de Aínsa-Sobrarbe y Comarca del Sobrarbe “su grandísimo trabajo e implicación, un trabajo muchas veces que la gente lo desconoce, pero totalmente imprescindible para el buen funcionamiento de nuestro municipio y comarca, mejorando la vida de nuestros vecinos y vecinas, y convirtiendo nuestro territorio en un gran lugar para vivir”. Bergua tiene una mención especial para el secretario municipal por su implicación con Aínsa-Sobrarbe. “Nos ha regalado horas, esfuerzo, iniciativa, resolución de cientos de problemas y mucha ilusión. Es algo que no había visto nunca, muchísimas gracias Pedro”, dice.
También cita a todos sus compañeros de corporación y conserjes de ambas instituciones y a Nicolás Baena “como máximo responsable de la oposición estos años, una gran persona que siempre ha priorizado lo que considera mejor para el municipio, independientemente de quien lo proponga, apoyando y ayudando en cosas que todos pensábamos que son buenas para el municipio, aun sabiendo, que, desgraciadamente, en política, si la oposición ayuda a mejorar el pueblo, normalmente es el equipo de gobierno el que "rentabiliza" estas acciones”, señala.
Se refiere también a todos sus compañeros y compañeras en los equipos de gobierno, juntas directivas, patronatos… en estos 9 años. “Nos ha tocado trabajar codo con codo y tomar muchas decisiones de forma conjunta, a veces muy difíciles, hemos acertado y también nos hemos equivocado, pero siempre, lo hemos intentado hacer con la mejor de nuestras intenciones. Ha sido enriquecedor e ilusionante trabajar con todos vosotros en cientos de proyectos y acciones”.
Y destaca la labor de Enrique Pueyo, “alcalde 24 horas al día y 365 días al año”, señala. “No he conocido a nadie tan cercano, implicado y trabajador como él, siempre nos ha tocado ir a su "rebufo" para intentar llegar a todo lo que nos ha propuesto. Gracias a su inacabable empuje -agrega-, nuestro municipio se ha convertido en un referente de muchas innovadoras iniciativas, que han servido de ejemplo en muchos lugares del país, una persona que intenta llegar a todos los pueblos del municipio y que se preocupa personalmente de los problemas de muchas de las personas más desfavorecidas”".
Finalmente agradece a los habitantes del municipio “su paciencia y buenas formas” a quienes pide perdón por irse de esta forma. “Pero a veces el cuerpo, pero sobre todo la mente, no aguanta lo que uno pensaba -dice-. Cierro 12 años apasionantes, en los que he coincidido con gente increíble, donde hemos conseguido sacar muchos proyectos, aunque muchos más no han llegado a materializarse. Me voy con la conciencia tranquila de haber dado todo lo que he podido, pero muy cansado”, reitera.
Su colabarción con el municipio y la comarca la desarrollará ahora en el equipo de voluntariado. “Como siempre he dicho, son el verdadero motor de dinamización y trabajo que tenemos la gran suerte de contar en nuestras montañas”, concluye.