Lorena Orduna, alcaldesa de Huesca, cierra este serial sobre los 10 años del Palacio de Justicia, que fue inaugurado el 15 de septiembre de 2014. Un hito que demuestra el valor de la centralización para la eficiencia de la Justicia. Y la constatación del compromiso del Gobierno de Aragón y del Ayuntamiento de Huesca (que cedió estos suelos del Polígono 41) para dotar de los recursos técnicos y humanos para el buen funcionamiento de uno de los grandes pilares de la democracia. Un eje "del Estado de Derecho y de la libertad" sobre el que reclama una defensa activa: "Tenemos que alzar la voz para defender nuestros valores, derechos y esa independencia para que sea real del resto de poderes".
Diez años de este Palacio de Justicia. ¿Imprescindible para su concepto de modernidad de la ciudad, alcaldesa?
Por supuesto que es imprescindible. Es un claro ejemplo de que la centralización en algo tan importante como la Justicia es necesaria y de que los usos de los antiguos edificios de la Audiencia no se han quedado vacíos, sino que han podido reutilizarse para servicios importantes de la ciudad y de La Hoya de Huesca.
Un oscense, Roberto Bermúdez de Castro, impulsó este edificio con Luisa Fernanda Rudi. ¿Fue una audacia como la que se necesita en otros ámbitos de la acción pública?
Supuso una revolución hace diez años para la ciudad de Huesca. El Ayuntamiento cedió estos suelos del Polígono 41 y el Gobierno de Aragón invirtió 12 millones de euros en este Palacio de Justicia que representa todos los ideales que tenemos en las sociedades democráticas no sólo para la ciudad sino para toda la provincia.
¿La concentración en un edificio es un paradigma de racionalizacion para otros servicios públicos?
Depende, el propio Ayuntamiento de Huesca tiene diversas edificaciones por toda la ciudad y depende de la propiedad, de los usos, del desarrollo urbanístico de los suelos que tenemos. Pero el concepto para el Palacio de Justicia de Huesca ha funcionado muy bien.
Aunque imponga respeto, ¿hay que desdramatizar las visitas a los juzgados en el sentido de que nada hay que temer si nada se ha hecho mal?
Yo soy más partidaria de llegar a la conciliación antes de tener que venir a un pleito o a un juicio final. Soy más de conciliar e intentar llegar a acuerdos por ambas partes siempre
¿Un ayuntamiento está permanentemente mirando hacia los palacios de justicia por la cantidad de asuntos que se dirimen?
Permanentemente, eso es así. Tenemos un buen departamento jurídico, unos buenos expertos del personal funcionario de la casa y que lideran muy bien estas cuestiones, así como apoyo externo de otros departamentos jurídicos y de otros despachos de abogacía. Estamos mirando siempre hacia los palacios de justicia por las múltples cuestiones que se desarrollan en una ciudad, desde cualquier caída en la vía pública de cualquier persona que puede denunciar el estado de un pavimento en malas condiciones a muchas otras urbanísticas, numerosos pleitos que tenemos en el Ayuntamiento.
¿Qué es para la alcaldesa de Huesca la Justicia?
La Justicia es para mí la máxima expresión para la libertad y la democracia que tenemos en los países. Sin ella, sería imposible garantizar que, de toda la libertad por la que abogamos, cualquier persona pueda defender cualquier problema. La Justicia garantiza el Estado de Derecho para todos los ciudadanos. Es imprescindible tenerla separada del resto de poderes y es la muestra de la evolución que como sociedad hemos vivido en los últimos años. Tenemos que garantizar que la Justicia siempre sea neutral y sirva para que todos los ciudadanos que puedan tener necesidad de ella se le garantice este Estado de Derecho, de democracia y de libertad.
¿Cree que en estos momentos esa independencia está amenazada?
Sí, quizás sí, estamos viéndolo en algunos países y lamentablemente también en España, que quizás ahora se están tambaleando los cimientos que han costado tanto para una sociedad igualitaria y democrática como España. Por eso creo que tenemos que alzar la voz para defender nuestros valores, derechos y esa independencia para que sea real del resto de poderes.
El Palacio de Justicia como concreción y abstracción de los derechos, ¿es el templo de la responsabilidad?
Desde las instituciones tenemos el derecho, el deber y la obligación de cuidarlo, de dotarlo para la máxima eficiencia posible tanto a nivel de recursos técnicos como personales, porque garantizar la agilidad tanto en los trámites burocráticas como en los pleitos es obligado. No puede ser que una persona con un problema tenga que someterse a años de espera para ciertos juicios en ámbitos penales o en contencioso administrativo. Creemos que es muy importante para garantizar todo lo que supone la justicia y la libertad para los ciudadanos y por eso las instituciones tienen que dotar de infraestructuras para que esa agilidad sea real.