Los vecinos del Casco Viejo de Huesca celebraron este vienes la Fiesta de La Malena, con una mezcla de sentimientos que se entremezclan: alegría, devoción y cierto desánimo porque algunos consideran que no se presta demasiada atención a este patrimonio de la ciudad.
La Asociación de Vecinos que preside Violeta Gracia se encarga de la organización de los actos, en los que hay personas como Ana y María José, que se implican especialmente. Ellas se ocupan de que la talla de la santa esté convenientemente engalanada, tras la restauración de 2013, y de que las flores del huerto de Antonio luzcan espléndidas. La fiesta concluyó con reparto de sangría, melocotón y torta, y la actuación del grupo de jota Os Faticos.
"Este es un lugar muy importante y también su historia", aseguran Ana y María José, y reclaman que este emplazamiento se incluya en las rutas de la Oficina de Turismo o, al menos, que se de a conocer el lugar para que la gente pueda visitarlo.