Un incendio en una vivienda en Gurrea de Gállego ha obligado al desalojo de una familia de nueve personas (el matrimonio, seis hijos y un abuelo) esta tarde, con un gran sobresalto para la localidad que ha vivido momentos de angustia tras declararse el fuego posiblemente por un cortocircuito.
Los bomberos de Huesca atribuyen el incendio a los cables de la casa contigua, y la rápida expansión ha obligado a movilizar a Protección Civil, Guardia Civil, Bomberos DPZ y Bomberos del Ayuntamiento de Huesca.
Independientemente de la versión oficial, la alcaldesa de Gurrea de Gállego, Ana Irigoyen, expresaba a EL DIARIO DE HUESCA la angustia con la que han vivido el siniestro. "Han podido salir los padres de la familia, con los seis niños y el abuelo. Ha habido un momento de gran tensión porque una de las pequeñas se había ocultado en el gallinero asustada por el fuego y ha supuesto un gran alivio que saliera sana y a salvo".
La familia, que lleva muchos años arraigada en la población, procede de Sabiñánigo y Ejea. La madre ha trabajado en la residencia y, de hecho, estaban plenamente integrados.
La acumulación de mobiliario y material inflamable como los propios colchones ha motivado que los servicios de extinción hubieran de emplearse a fondo y, cuando parecía que estaba totalmente apagado, se ha reactivado. A estas horas, casi las nueve de la noche, se prevé la posibilidad de que un retén de bomberos haya de permanecer varias horas para evitar cualquier rebrote.