A las 18:00 de este viernes se ha reabierto al tráfico la carretera A-138, que permanecía cortada desde que el pasado 7 de septiembre las fuertes lluvias ocasionaron un considerable aumento del caudal del río Barrosa que provocó la erosión completa de tres cuartas partes de la calzada, lo que obligó a cortar la vía hasta su reparación provisional.
La solución ha consistido en la habilitación de un carril provisional, una vez el caudal del río bajó lo suficiente como para permitir a los técnicos efectuar los trabajos, que han consistido en la realización de una cimentación de piedra para apoyar el terraplén sobre el que se ha realizado el desvío y sobre el que, a su vez, se ha dispuesto una capa de zahorra artificial, encima de la cual se ha echado hoy una capa de aglomerado de seis centímetros de espesor. La meteorología adversa, con lluvias intensas durante varios momentos de la mañana de este viernes ha impedido comenzar los trabajos de asfaltado hasta pocos minutos antes de las 13:00.
Con esta actuación, acometida en menos de dos semanas desde que la última dana provocara daños en diversas carreteras del Pirineo, se vuelve a habilitar uno de los dos pasos fronterizos que permanecía cortados y que permite el tránsito de todo tipo de vehículos, incluido camiones salvo los que transportan mercancías peligrosas, dada la limitación del túnel de Bielsa-Aragnouet en relación a este tipo de cargas.
Cabe recordar que este paso alternativo regulado por semáforos se suma al ya existente en el punto kilométrico. 80 que permite la comunicación con Bielsa de los núcleos de Parzán y Chisagües, que quedaron incomunicados durante algunas horas el 7 de septiembre por una mordida ocasionada por el crecimiento extraordinario del caudal del río. Se recomienda, por tanto, que los conductores que circulen por ambos tramos de la A-138 extremen las precauciones y respeten en todo momento las indicaciones y la limitación de velocidad a 40 km/h en los tramos afectados.