Las nuevas urgencias del Hospital San Jorge de Huesca, que atienden a una media de 105 pacientes diarios, se pondrán en marcha el 1 de marzo a las 8:00 y se dirá adiós a las oscuras y raquíticas dependencias inauguradas en 1996, que se habían quedado obsoletas ya desde hace unos años.
El servicio actual dispone de 1.700 metros para zona asistencial y se ha habilitado un área de hospedería, en la segunda planta, para el descanso y despachos de los profesionales.
En total, el Gobierno de Aragón ha destinado 5,8 millones de euros a la obra y 900.000 para el equipamiento.
El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, y la consejera de Sanidad, Sira Repollés, han visitado este miércoles las instalaciones, y a su llegada han sido recibidos con pitos y protestas. Profesionales de este centro, agolpados en el acceso a este servicio, han mostrado pancartas con diversos lemas y han reclamado un aumento de la plantilla para atender el nuevo espacio y también han expresado sus reivindicaciones trabajadores del transporte sanitario.
El director gerente del Sector Sanitario de Huesca y Barbastro, Miguel Zazo, ha sido el encargado de explicar los detalles del nuevo espacio, en el que van a trabajar 85 profesionales. Como ha comentado, la plantilla orgánica de 2016 era de 61 trabajadores, a los que se sumaron 24 para hacer frente a la pandemia de covid-19, cuyos contratos se han mantenido y a partir de ahora pasan a formar parte de la plantilla oficial.
Por ello, Javier Lambán ha ironizado señalando que "nunca había visto una protesta tan imaginativa" como la que se ha encontrado esta mañana en la capital oscense. "Lo lógico es que aquí vengan las mismas personas necesitadas de una atención urgente que antes de la pandemia. Van a tener 24 profesionales más, van a tener unas instalaciones mucho mejores y no entiendo que por el hecho de que sea una superficie más grande haya que aumentar el personal. Me imagino que para la limpieza, sí".
Miguel Zazo ha detallado que las nuevas instalaciones, que se han diseñado con la idea de brindar una mayor comodidad, sobre todo para el paciente, ofrecen "espacios diáfanos y con una luminosidad especial", que evitarán las aglomeraciones y redundarán en un mayor bienestar de los enfermos y de los empleados. "Hemos trabajado con sistemas de reposo y de movilidad lo más ergonómicos posibles, tanto para camillas, como sillas de ruedas, como para los habitáculos. Los pacientes van a notar, sobre todo, que el espacio es más amigable".
Además, se han añadido sistemas de seguridad clínica, como la monitorización centralizada y un seguimiento portátil cuando sea necesario realizar traslados.
Se dispondrá también, en busca de una mayor eficiencia energética, de mejores sistemas de climatización y la zona de hospedería, destinada al descanso de los profesionales, contará con lugares más individualizados. Además, en la sala de médicos habrá un puesto para cada facultativo y tendrán acceso a unos sistemas "que les van a facilitar mucho el trabajo".
"Los profesionales van a seguir siendo los mismos" y, por lo tanto, "excelentes" y los ha calificado como "el alma del servicio".
Miguel Zazo ha indicado, por otro lado, que se va a realizar un estudio de viabilidad para destinar la vieja zona de urgencias "a otro servicio asistencial".
ASÍ SON LAS NUEVAS URGENCIAS
El hospital cuenta con un nuevo edificio adosado a las actuales urgencias y paralelo al edificio de consultas externas, distribuido en planta baja y un pequeño espacio en planta primera, con una superficie total de 2.194 metros cuadrados construidos.
El área de recepción, con dos accesos diferenciados para pacientes que llegan en ambulancia y para los que lo hacen por sus propios medios, contará con 275 metros cuadrados, e incluirá dos puestos de triaje (actualmente hay uno) y sala de espera.
La zona médico quirúrgica tendrá 368 metros cuadrados y dispondrá, entre otros servicios, de box de reanimación con dos puestos (hay 1 actualmente), 9 boxes de patología general (hay 5 en estos momentos), 1 de Oftalmología, 1 de psiquiatría y 1 de Otorrinolaringología, sala de yesos y curas, además de sala de espera. En cuanto al área quirúrgica, de 67 metros cuadrados, se dispondrá de una sala blanca y de todos los servicios complementarios que precisa.
El nuevo inmueble contará también con una zona de Psiquiatría, de 25 metros cuadrados, con consulta y sala de espera; y zona de Pediatría que, además de consulta y sala de espera, dispondrá también de baño pediátrico y sala de lactancia. La sala de observación contará con 13 puestos (hay 9 en la actualidad) e incluirá también tres boxes de aislamiento, además de los servicios complementarios que precisa esta área.
Cabe destacar que todos los boxes pasan, además, a ser habitaciones en el nuevo servicio con 16 metros cuadrados de superficie, lo que mejora notablemente la comodidad y la intimidad de los pacientes. Se han renovado, además, todos los equipos de soporte vital (respiradores, desfibriladores, etc) y, para mejorar la confortabilidad, se han adquirido camas y camillas para la atención de urgencias con todas las novedades ergonómicas para los pacientes y para los trabajadores. También se han comprado nuevos sillones para los pacientes que precisen estar sentados.
UN CENTRO MODERNO
Lambán y Repollés han estado acompañados en su visita por el alcalde de la ciudad, Luis Felipe, la subdelegada del Gobierno, Silvia Salazar, la delegada territorial del GA en Huesca, Carmen Luesma, el presidente de la Comarca, Jesús Alfaro, y miembros de la corporación local, entre otros.
Javier Lambán ha considerado que las nuevas urgencias del Hospital San Jorge se corresponden con "un centro moderno, acorde con los nuevos tiempos, la demanda de los ciudadanos y con la vocación de servicio del Gobierno de Aragón, a la hora de gestionar la Sanidad".
El presidente ha afirmado que la ciudadanía le debe mucha "gratitud" al personal sanitario, por su "profesionalidad, competencia y compromiso" y ha considerado que no hacen falta mejores sanitarios, sino que es preciso contratar más. Y, al respecto, se ha lamentado de la carencia de profesionales.
Ha destacado, que, por primera vez en tres años, este miércoles no hay ninguna persona en Aragón ingresada en la UCI por covid y ha asegurado que el GA no ha "regatead medios ni esfuerzos" para luchar contra la pandemia.