Vecinos y regantes de las localidades de Salillas y Huerto se han vuelto a enfundar la camiseta que simboliza su oposición a un proyecto que, según consideran, amenaza su futuro. Lo han hecho este sábado en una concentración en la plaza de Navarra, que es continuación de las acciones que realizan desde hace 9 meses con movilizaciones ante la Subdelegación del Gobierno, la sede de Riegos del Alto Aragón y en Salillas, además de presentar alegaciones y recurrir a la justicia.
Se oponen al proyecto de mejora en el aprovechamiento de agua y ahorro de energía para las comunidades de regantes del sector X y XI del canal del Flumen, con una inversión de 55 millones de euros.
En la plaza de Navarra han colgado tres pancartas en las que se indicaba: “Salillas no quiere embalses que dejen vacío su pueblo”, “Queremos transparencia en la gestión de los fondos europeos Next Generation” y “No queremos que se destroce nuestro futuro”. Además, las camisetas llevan por lema “Proyecto de interés general, ¿para quién?”.
El profesor de la Escuela Politécnica Superior de Huesca César González-Cebollada, que ofrece asesoramiento técnico a los regantes y vecinos de Salillas, ha explicado en la concentración la situación del proyecto. Considera este doctor en Mecánica de Fluidos que el interés general en este proyecto no existe, “por lo tanto, no hay justificación moral para ir al vecino con prepotencia, por detrás, a tratar por la fuerza de sacarle de su territorio, porque entonces surge la defensa territorial, que es mucho más que una cuestión económica, es una cuestión de dignidad”, ha afirmado.
“No tienen ningún derecho a poner las balsas y las tuberías, a fastidiar una explotación porcina. Después de esta lucha, de esta unión y esfuerzo, va a haber justicia”, ha considerado.
José Ramón Santolaria, alcalde de Salillas y vocal de la Junta de Riegos A19-20, ha considerado el proyecto “un atropello sin precedentes, que se puede llevar por delante el trabajo esfuerzo de las generaciones que nos han precedido, nuestro trabajo en estos momentos y el futuro de nuestros hijos”.
Ha señalado que están realizando una carrera de fondo contra este proyecto del sector X y XI, “que vamos a intentar ganar por todos los medios, pero no va a ser fácil”.
“A día de hoy -ha continuado-, no sabemos ni cómo se ha declarado de interés general, ni para quién es de interés general. Los promotores, con César Trigo a la cabeza y amparados por la empresa Seiasa, pretenden regar 6.700 hectáreas a costo cero de energía mediante la construcción de dos grandes balsas en el término municipal de Salillas. La primera está proyectada a 150 metros del casco urbano, la segunda, de prácticamente un hectómetro cúbico de capacidad, estaría a 400 metros de Salillas y a 30 metros de una explotación porcina en la que trabajan 6 personas, y cuya viabilidad se puede ver muy mermada”. Tras este resumen, Santolaria ha considerado que “la construcción de estas dos balsas para Salillas sería un desastre medioambiental y de habitabilidad”.
Además, “de estas balsas pretenden arrancar con dos tuberías de 1.600 mm. de diámetro montadas en paralelo, y de 14 kilómetros de longitud cada una, como el que dice agua va. Atravesando gran parte del sistema de regadíos de la A19-20, sector 34 de Salillas y de Huerto, sector 35 bis y sector 35. Tendremos aproximadamente 2.000 hectáreas en nuestros sistemas de regadíos con grandes problemas de riego durante los dos, tres o más años que duren las obras”, ha recriminado el alcalde.
“Nosotros no estamos en contra de que el Sector X modernice sus regadíos, y de que el sector XI ahorre energía. Y si les han adjudicado esa cantidad de dinero que lo aprovechen, pero que lo hagan sin cometer este atropello y sin perjudicarnos de esta manera”, ha afirmado y ha añadido que “este proyecto tiene alternativas que sí son viables económica y técnicamente”.
Ha recordado que no se han contestado a las alegaciones que presentaron y ha asegurado que el proyecto no cumple ninguno de los condicionantes para estar exento de pasar el impacto medioambiental. “Aquí estamos luchando contra los grandes poderes, pero por encima están las personas, su medio de vida. Vamos a seguir peleando -ha asegurado- de la mano de abogados y técnicos, para llegar a donde sea necesario, a los tribunales de justicia, a Bruselas, a donde se nos quiera escuchar y se nos quiera entender. Vamos a seguir insistiendo en el Ministerio con recursos y lo que sea necesario”.
“Dicen que en un mes y medio licitan estas obras. Pues adelante. Nosotros hace más de un año que licitamos y nos adjudicamos la tarea de parar este despropósito”, ha finalizado.