El verano será muy probablemente más cálido y también previsiblemente más seco de lo normal en Aragón, según ha avanzado la delegación en Aragón de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), en la presentación este jueves del balance climático correspondiente a la primavera.
La estación fue cálida en el conjunto de Aragón y las precipitaciones estuvieron por debajo de los valores normales, aunque con una gran desigualdad entre el mes de marzo, muy húmedo, y los de abril y mayo, muy secos.
La primavera de 2024 fue cálida en el conjunto de Aragón, con una temperatura media de 13,2 grados, lo que supone 0,8 más que el promedio del período de referencia 1991-2020.
En Aragón, tanto marzo como abril fueron muy cálidos, mientras que mayo se mantuvo en valores normales. La distribución espacial de las anomalías térmicas muestra un rango de valores entre -0,2 grados en Jaca y Fanlo-refugio de Góriz- y +1,5 en Montalbán, con respecto a las normales climatológicas del periodo de referencia. Se sitúa como el noveno trimestre primaveral más cálido desde al menos 1961; la primera posición la ocupa el 2023 con +1,7 grados de anomalía.
La primavera en Aragón fue en su conjunto seca en cuanto a precipitaciones, con un valor medio de un 85 % respecto a lo normal del trimestre en el periodo de referencia 1991-2020.
Marzo fue muy húmedo y abril y mayo fueron muy secos, otorgando un carácter pluviométrico seco a la valoración del conjunto estacional.
La variación en su distribución territorial oscila entre totales pluviométricos, respecto a la normal, del 25 % en Andorra y del 168 % en Biescas-Búbal, con un déficit promedio de 24 litros por metro cuadrado para todo Aragón.
El trimestre conformado por los meses de julio, agosto y septiembre, coincidente aproximadamente con el verano astronómico que comienza este jueves a las 22.51 horas, será muy probablemente más cálido de lo normal en Aragón, con una probabilidad del 70 % de encontrarse en el tercil superior.
En cuanto a las precipitaciones, el trimestre podría ser más seco de lo habitual, aunque en este caso hay que tomar el pronóstico con cautela, ya que la probabilidad de que estén en el tercil inferior se sitúa en el 50 %.