El Grupo Municipal de VOX en Huesca ha criticado la que considera "lamentable gestión de las obras del Centro de Emergencias" tras el reciente visto bueno del equipo de gobierno a un primer modificado del proyecto, que incrementa el coste en más de 250.000 euros (casi un 7% adicional), que estima que desvela "la absoluta falta de rigor, previsión y responsabilidad en la planificación y ejecución de esta infraestructura vital para los oscenses".
Afirma VOX que, tras más de siete meses desde el inicio de las obras en junio de 2024, "el avance es prácticamente inexistente, a pesar de contar con un plazo de ejecución de 24 meses". En este contexto de parálisis, es inadmisible que se aprueben incrementos presupuestarios con justificaciones que no resisten el más mínimo análisis.
La aprobación del modificado se ha sustentado en tres razones principales, explica VOX. Por un lado, "circunstancias sobrevenidas relacionadas con redes subterráneas: Es inconcebible que en un proyecto de esta envergadura, redactado y aprobado con recursos públicos, no se haya tenido en cuenta la existencia de redes subterráneas en la zona". Estima que hay un "nivel de improvisación inexcusable y demuestra una absoluta falta de previsión" en el proyecto que fue aprobado por la anterior corporación en marzo de 2023.
En segundo lugar, modificaciones para equipar los cuartos húmedos, lavabos, grifos o inodoros. "Este tipo de errores son una muestra inequívoca de la falta de supervisión y del desprecio por la eficiencia en la gestión de los recursos públicos".
Finalmente, las modificaciones no sustanciales sin ahorro de costes, con "cambios en los materiales por otros supuestamente más convencionales, que deberían haber reducido los costes. Sin embargo, este ahorro no se refleja en ninguna parte del modificado".
"Este nuevo episodio de descontrol y despilfarro no es un caso aislado. Forma parte de una preocupante tradición en la gestión de las obras públicas, protagonizada tanto por los gobiernos de toda índole del PP como del PSOE", añade VOX, qje pregunta quién dio el visto bueno al proyecto, por qué no se detectaron los fallos en la redacción y quién asumirá las consecuencias si hay nuevos retrasos y sobrecostes.
Reconoce que el modificado promete "garantizar el cumplimiento de los plazos de ejecución", aunque VOX lo pone en duda y advierte de que estará vigilante en el seguimiento de esta obra financiada por el Gobierno de Aragón y gestionada por el Ayuntamiento de Huesca.