La Agrupación Folklórica Santa Cecilia ha culminado su 70 aniversario con una gran gala en el Teatro Salesianos, coincidiendo con la festividad de su patrona. Este evento ha inaugurado también una semana de actos festivos y ha servido para renovar los cargos de mayorales y mairalesas, con el respaldo de una entidad que presume de mantener vivas las tradiciones.
Su presidenta, Alicia Monaj, ha sido la encargada de dar la bienvenida a los asistentes. En su intervención, ha recordado la trayectoria de la agrupación, subrayando que estos 70 años "no son solo un número, sino un reflejo del esfuerzo y la dedicación de muchas generaciones". También ha señalado que Santa Cecilia sigue siendo un símbolo de unidad y orgullo cultural para la ciudad.
Con un tono muy cálido, ha agradecido a los integrantes actuales y a los colaboradores su "entrega incondicional", destacando que "cada ensayo, cada canción y cada gesto son parte del legado" que dejan a quienes vendrán después.
Antes de la proclamación de los nuevos mayorales, Monaj ha dirigido unas palabras a los salientes, Noravilla, Pedro, Carmen y Miguel Ángel, destacando su dedicación. Ha mencionado que "han sido un ejemplo de compromiso y pasión", y ha invitado al público a despedirlos con un fuerte aplauso. Además, ha enfatizado la importancia de pasar el testigo a las nuevas generaciones, garantizando así la continuidad del espíritu de Santa Cecilia.
La presentación de los nuevos mayorales y mairalesas ha sido un momento especialmente emotivo. En primer lugar, se ha dado paso a Alaia Algaba Allué, quien ha asumido el título de mairalesa infantil. Descrita como "cantadora y bailadora", Alaia ha sido elogiada por su energía y su amor por la música, cualidades que ha heredado de su madre, Tania, una guitarrista muy vinculada a la agrupación. Monaj ha subrayado que Alaia, pese a su juventud, es ya un ejemplo para los más pequeños.
Seguidamente, se ha presentado a Mateo Pertusa Cabrero como mayoral infantil. Mateo ha sido definido como un joven que vive el folclore con intensidad, inspirado por su familia. Ha destacado su habilidad para compaginar el amor por la jota con sus estudios y otras aficiones, como el fútbol, las manualidades y los inventos.
En el turno de los adultos, Lucía Susín Giménez ha sido proclamada mairalesa mayor. Monaj ha destacado que su constancia, disposición y espíritu colaborador son cualidades que "hacen que todos se sientan cómodos e importantes a su lado". Además, ha recordado que este año ha sido parte activa de la Comisión de Fiestas.
El último en ser presentado ha sido Javier Callau Pontaque, como mayoral mayor. La presidenta ha destacado de él su profundo compromiso con el folclore y su papel como representante de los valores de la agrupación. Ha completado los estudios de Medicina y completa la residencia en Madrid.
Después de las presentaciones, Jara Expósito ha asumido las labores de presentadora, como ya es habitual, y ha recordado cómo se iniciaban antaño las actuaciones, además de recalcar cuáles son los valores que distinguen a esta asociación, que siempre se autocalifica como "una gran familia".
Poco a poco, se ha desarrollado todo el espectáculo, en el que han participado la rondalla, cantadores y bailadores, con algunos de los temas habituales en el repertorio de la Agrupación Folklórica, como la jota de Santa Cecilia, para comenzar, y la de San Lorenzo, para finalizar, pasando por la Pulida Magallonera, S'ha Feito de Nuey o una auténtica exhibición de trajes regionales, acompañados de melodías acordes.
En el espectáculo también han participado los alumnos de la escuela de Santa Cecilia, que cuenta con un centenar de niños y niñas. Junto con las gaitas, han realizado un paloteau desde el fondo del salón de actos hasta el escenario, donde luego han accededido con el resto del grupo en el fin de fiesta.
Tras el espectáculo en el Teatro Salesianos, los nuevos mayorales y mairalesas han sido rondados en el local de la Agrupación, cerrando una noche cargada de tradición y emoción. Este acto simbólico ha marcado el inicio de una semana festiva que promete ser inolvidable, celebrando siete décadas de amor por la música y el folclore.