El 1 de julio cumplió 21 años y, a pesar de su juventud, en el currículum del ayerbense Iñaki Carcavilla Garasa figuran ya una ópera, una obra para la banda municipal de Bilbao Musika y la banda sonora de una película. Impresionante.
La quietud en la tormenta (Gelditasuna ekaitzean) es el título del filme, que se estrenará en la 70.ª edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián el martes 20 de septiembre en el Teatro Victoria Eugenia, durante la Gala del Cine Vasco. La cinta está programada en la sección Zinemira y competirá por el Premio Irizar al Cine Vasco, dotado con 20.000 euros.
La productora contactó con el Conservatorio Superior de Música del País Vasco Musikeme, donde Iñaki Carcavilla va a estudiar cuarto curso de Composición, y el centro le asignó el proyecto al altoaragonés. “Y yo encantado -afirma Iñaki -. Lo primero que pensé es que era una gran oportunidad para seguir aprendiendo y formándome, y para tener una visibilidad como compositor: siempre está bien que tu nombre salga y suene”.
El director de la película, Alberto Gastesi, le encargó dos piezas y le indicó que debían ser para trío con piano (violonchelo y violín). Le pasó también un listado de referencias sobre el estilo que buscaba, un guion para que supiera dónde debía encajar la música y el tiempo que debía durar. “Pasas nervios, obviamente, te planteas si lo habré hecho bien, si habré sabido captar la esencia de la escena… Cuando vas a presentar una partitura, ya sea con tu profesor en clase, o con encargos de esta magnitud, siempre vas con inseguridades. Y más cuando no es un estilo al que estás acostumbrado, porque en el Conservatorio me enseñan otros más contemporáneos”, explica.
Pero el director quedó encantado. “No es lo que tenía pensado, pero me gusta más”, le dijo Gastesi.
“Eso te reafirma -admite Iñaki con humildad-, la verdad es que fue muy fácil trabajar con él, me dio bastante libertad y me dijo que estaba abierto a mis sugerencias. Estuve súper a gusto”.
'La quietud en la tormenta reúne a un elenco de actores encabezados por Loreto Mauleón (Patria, El secreto de Puente Viejo), en su primer papel protagonista en un largometraje, e Iñigo Gastesi (La línea invisible, Lasa eta Zabala). Les acompañan Aitor Beltrán (El Internado, Las cumbres, El hijo del acordeonista) y Vera Milán (Somos).
Este drama de Vidania Films se grabó entre los meses de abril y junio de 2022, en euskera y castellano, y en blanco y negro, y tiene una duración de 96 minutos. Este otoño se estrenará en las salas de cine.
La música de Iñaki Carcavilla ayuda a conectar los dos planos temporales entre los que navega la trama, e insufla a las escenas más tristeza y melancolía. “Las bandas sonoras siempre aportan muchos detalles a cualquier película. Una escena de amor con una música de miedo no va a transmitir lo mismo”, observa el joven compositor.
La experiencia le ha permitido aprender un nuevo estilo, más minimalista de lo que estaba acostumbrado. Su ópera Culibillas (2020) era para 25 ó 26 músicos y la obra Morfeo para la Banda de Bilbao, que estrenó en el Palacio Euskalduna de la capital vasca, el pasado 13 de marzo, para 60. Iñaki subraya lo que supuso para él trabajar con una banda profesiona y con José Rafael Pascual Vilaplana, uno de los directores más importantes de este tipo de formaciones. “Fue un lujo y un placer, y estoy deseando colaborar de nuevo con ellos, si es posible”, afirma.
TRABAJO, TRABAJO Y TRABAJO
Iñaki Carcavilla se fue de Ayerbe con 18 años. Estudiaba trombón en el Conservatorio Profesional de Música ‘Antonio Viñuales’ de Huesca y lo lógico hubiera sido seguir con el mismo instrumento, pero una asignatura, Fundamentos de Composición, y un profesor, Chusé Chabier Pérez, se cruzaron en su camino y decidió dirigir sus pasos por este nuevo derrotero.
“Chusé Chabier Pérez me decía que él no podía enseñar a componer, que eso se lleva dentro, y que lo que él podía hacer era ayudarnos a expresar nuestras ideas”, recuerda. Y se sintió “enganchado” a esta especialidad.
Superó las exigentes pruebas de admisión del prestigioso Centro Superior de Música del País Vasco Musikene y allí le recibieron “con los brazos abiertos”. Entre otros profesores, figura Gabriel Erkoreka, Premio Nacional de Música 2021, que imparte Técnicas de Composición.
Al principio quería dedicarse a crear música de escena, como ópera o ballet, pero la película le ha abierto nuevas perspectivas y ya no sabe con qué rama quedarse.
"Si quieres algo, puedes hacerlo; todo es una cuestión de trabajo, trabajo y trabajo"
Lo que no le ofrece ninguna duda es la idea de que las cosas le seguirán saliendo bien, si hay trabajo detrás. “Es una pena que por ser Huesca una ciudad pequeña y Ayerbe un pueblo pequeño no haya estas oportunidades y tengamos que dejar nuestro hogar, pero el mejor consejo es el que me daba Chabi (Chusé Chabier Pérez): si quieres algo, puedes hacerlo; buscas y rebuscas, y acaba saliendo. Todo es una cuestió de trabajo, trabajo y trabajo”.
Y vuelve a citar a su antiguo profesor para subrayar que “el trabajo llama a trabajar” y que “en composición tu mejor amiga es la goma, para borrar y volver a empezar”.
Mientras sigue forjando su estilo y su personalidad en la música, Iñaki Caracavilla aguarda a que llegue el 20 de septiembre, para acudir con todo el equipo de La quietud en la tormenta a ver el estreno de la película. “A ver si hay suerte, sería un puntazo”, suspira. Pero ya sabe que, por delante de la suerte, cuenta con dos bazas importantes: Talento y capacidad de esfuerzo. De ambas cosas, tiene de sobra.