Blas Coscollar recupera con el tema "Cuando san Ramón" a los desaparecidos danzantes de Barbastro

El músico, especialista en folclore, ha preparado un arreglo de la melodía tradicional que estrenó la coral Barbitanya el pasado junio y que será danzado en septiembre "con palos, gaitas, dulzainas y percusión"

14 de Julio de 2024
Guardar
Blas Coscollar retratado por José Luis Mur Vidaller.
Blas Coscollar retratado por José Luis Mur Vidaller.

La música tradicional necesita de investigadores y músicos que apuesten por conservarla e interpretarla para que no desaparezca y que las nuevas generaciones la puedan disfrutar. Blas Coscollar es una de esas personas que ha luchado intensamente, a lo largo de toda su trayectoria, por salvaguardar el patrimonio musical altoaragonés.

El pasado mes de junio, coincidiendo con las fiestas de san Ramón, la coral Barbitanya, dirigida por Paloma Lanau, estrenó un arreglo coral realizado por el músico barbastrense que recupera una melodía tradicional de los danzantes de Barbastro, tal y como él mismo explica: "Cuando publiqué el `Método de dulzaina aragonesa´ ya incluí las melodías del `paseo´ y las `mudanzas´ porque Barbastro ha tenido danzantes de palos y espadachines que, según se dice, hace casi cien años –no sé por qué razón– dejaron de salir para las fiestas".

El músico barbastrense Blas Coscollar va a restaurar en el folclore actual melodías y bailes de los desaparecidos danzantes de Barbastro.
El músico barbastrense Blas Coscollar va a restaurar en el folclore actual melodías y bailes de los desaparecidos danzantes de Barbastro.

La propuesta llegó por parte del gaitero Juan Carlos Girón, como aclara Coscollar: "Hace unos meses me animó a que compusiera alguna canción que pudiera servir de himno para el Somontano. A mí los himnos no me entusiasman, pero vi la posibilidad de retomar el tema de los danzantes. El arreglo coral me satisfizo, pero faltaba una letra en la que pudieran reconocerse los actuales habitantes del Somontano. Juan Carlos Ferré -amigo infantil de la Plaza- me orientó hacia la poeta Estela Puyuelo que no dudó en aceptar el reto. El resultado pudo escucharse hace unas semanas en los Escolapios de Barbastro. Lo que, en su origen era una danza cantada, ha terminado siendo una canción".

Logo WhatsApp
Suscríbete a nuestro canal de WhatsApp para tener la mejor información

La pieza se interpretó por primera vez en la iglesia de los Escolapios en el IX encuentro coral "Ciudad de Barbastro", el pasado veintidós de junio, donde participaron la Coral Fraga, el Coro Joaquín Gaztambide de Tudela y la propia Coral Barbitanya: "También fue propuesta de Juan Carlos Ferré ofrecérsela a la coral Barbitanya, que no tardó en hacerla suya. La iglesia de los Escolapios requirió añadir asientos complementarios para poder acoger a todo el público que quería estar presente en su presentación. La coral Barbitanya, como ya nos tiene acostumbrados, hizo una excelente interpretación que fue muy aplaudida por los asistentes", explica el músico.

La Coral Barbitanya interpretó el arreglo coral "Cuando san Ramón", realizado por Blas Coscollar, en el IX Encuentro Coral Ciudad de Barbastro.
La Coral Barbitanya interpretó el arreglo coral "Cuando san Ramón", realizado por Blas Coscollar, en el IX Encuentro Coral Ciudad de Barbastro.

En cuanto a cómo transcurrió el acto, no dice: "El sonido de la gaita de Juan Carlos Girón `presentó' las melodías, el coro cantó el estribillo, como cuando niños lo hacíamos debajo de los puentes; como nosotros, se acompañaron de “litófonos”: un par de cantos rodados del Vero que marcaban el ritmo: “Cuando san Ramón / vino a este lugar / gato por conejo / le quisieron dar”.  Después, la polifonía y la preciosa letra de las estrofas. Algunos de los cantores -y una parte de los asistentes- todavía recordaban este estribillo infantil. Ojalá esta nueva propuesta también sea interiorizada por las nuevas generaciones y la recuerden con el paso de los años”.

Por su parte, Paloma Manau, directora de la coral Barbitanya desde el curso 2022-23, explica que "la obra les ha llenado de recuerdos y su aprendizaje ha resultado gratificante porque a melodía y los textos les han transportado a su infancia y una cierta melancolía, pensando en  los tiempos pasados, se podía percibir en algunos momentos".

La profesora de canto, que lleva dirigiendo grupos no profesionales desde hace veinticinco años, insiste en la importancia de conservar el patrimonio musical: "La recuperación de cualquier melodía tradicional es siempre maravillosa. No debemos olvidar que las tradiciones y costumbres son nuestro  código genético,  somos lo que somos por ellas. El folclore nos da una visión detallada de las sociedades del pasado y es una manera de reconocer y conocer nuestro entorno y  nuestra herencia social".

El próximo mes de septiembre, Blas Coscollar tiene el proyecto de recuperar, también, la parte bailada para que la recuperación del dance tradicional se complete: "Este año está siendo particularmente fecundo. Al “Cuando san Ramón” coral le sucederá en septiembre el `Cuando san Ramón´ danzado con palos gaitas, dulzainas y percusión, recuperándose así la joya de la corona de nuestro patrimonio etnomusical.

Paloma Manau, directora de la coral Barbitanya desde 2022
Paloma Manau, directora de la coral Barbitanya desde 2022

Y no es el único proyecto de recuperación en el que está trabajando el músico: "En Labuerda -donde tenemos casa- saldrá “Engruzia, la dragona de Labuerda” que se unirá a la nutrida y ya veterana “Inmemorial Comparsa de Gigantes y Cabezones de Labuerda y en en Sarabillo, el 15 de agosto, recuperaremos el `Baile de la rosca´, rescatado de una grabación que hice hace  casi 50 años…", añade.

Para finalizar, Coscollar explica que no es suficiente con recuperar el patrimonio inmaterial, sino que se puede hacer algo más: "Después de haber recuperado un sustancioso patrimonio musical, no sabemos muy bien qué hacer con él, quizás porque  ignoramos el enorme potencial que encierra. Por ese motivo reivindico el espacio que ha perdido la que llamo `música endémica´: instrumentos tradicionales y acústicos -sin amplificación-, apertura a propuestas nuevas, tocar para uno mismo… –porque `el hombre y la mujer son músicos´ que tienen la capacidad innata de disfrutar interpretando y creando música–. En resumen, música `de puertas para adentro´: tocar por el placer de tocar; regalar y regalarse el placer de escuchar y ejercitarse en la música y su ´pareja, la danza.

 

Archivado en

Suscríbete a Diario de Huesca
Suscríbete a Diario de Huesca
Apoya el periodismo independiente de tu provincia, suscríbete al Club del amigo militante