El Bosque Ilustrado es un proyecto que lleva la firma del artista oscense Antonio Santos y forma parte ya del patrimonio de Ballobar, todo un referente, desde ahora, para el mundo de la cultura. Quien desee conocerlo, puede acudir este jueves, 27 de abril, a una visita guiada que comenzará a las 11:00.
Un total de 21 esculturas de acero corten, que oscilan entre los 60 centímetros y los 2,20 metros, se han emplazado en un espacio situado en la prolongación de la escuela municipal y las piscinas de la localidad bajocinqueña, donde hay un bosquecillo de pinos de repoblación. “La intención es que tenga una repercusión amplia, como la puede tener el festival Sonna o Pirineos Sur -indica el artista-, iniciativas que se hacen en la provincia y que la convierten en una rara avis dentro del panorama español, porque, siendo una capital de las pequeñas, tiene una oferta cultural muy grande".
Uno domador de leones, la cabeza gigante de un payaso, un elefante azul, los tres cerditos, el gato con botas, Hansel y Gretel, una bruja malcarada, un señor que pasea con su perro y un forzudo levantando pesas. Estos son solo algunos de los personajes que desde este martes viven ya para siempre en el Bosque Ilustrado de Ballobar.
Antonio Santos (Lupiñén, 1955) es Ilustrador, escritor, escultor y pintor. Ha realizado más de sesenta exposiciones individuales, publicado decenas de libros y recibido varios premios, como el segundo Premio Nacional de Ilustración y el Daniel Gil al Mejor Libro Infantil 2003.
En este proyecto, aborda tres temas que son muy frecuentes en su obra, como es el mundo del circo, los cuentos y gente paseando por la calle. “El circo siempre me ha interesado mucho, me gusta esa cosa que tiene de romántico y de antiguo, la vida de los acróbatas, la gente que vive en roulottes”, señala.
El trabajo de Antonio Santos siempre ha estado muy ligado el mundo de la infancia. “De hecho -observa-, tengo siempre una manera de hacer un poco ingenua y se adapta bastante bien a la ilustración infantil”.
En ese mismo Lugar del Bosque Ilustrado, hay un par de edificaciones que se van a rehabilitar para llevar a cabo talleres de plástica y creatividad, y encuentros de cuentacuentos, narradores orales e ilustradores. Además, el proyecto prevé construir un anfiteatro en el que se puedan realizar actuaciones de todo tipo, vinculadas al mundo de la infancia, el álbum y la ilustración, al mundo de la literatura infantil y juvenil.
“En un principio participarán los niños de Ballobar y comarca, y luego esta actividad se hará extensible a otros lugares”, ha indicado Santos.
El artista de Lupiñén ha diseñado los bocetos y unas maquetas que ha adquirido la Diputación Provincial de Huesca para su fondo artístico. En base a este trabajo, ha creado las esculturas en las proporciones que se muestran en el Jardín Ilustrado.
Lleva instalado en Ballobar desde hace mes y medio. Sus creaciones han sido reproducidas en acero por la carpintería metálica Miag de Huesca, “que son muy buenos”. Después, el propio Antonio Santos ha pintado cada una de las piezas, y el proceso ha culminado con la aportación de una gruesa capa de barniz para protegerlas.
Este martes, todas las piezas han quedado instaladas. Cada una de ellas descansa sobre una base de hormigón, de dos a tres toneladas de peso y de 20 centímetros de espesor. Así, se alzan 10 centímetros por encima del suelo. Antonio Santos está muy satisfecho de cómo ha quedado todo.
“Está muy bien que se hagan iniciativas de este tipo, porque hablan mucho de la España vacía, que se va despoblando, y yo creo que hay que generar proyectos ambiciosos y atrevidos para fijar la población al territorio”, reflexiona.
Para Antonio Santos, trabajar con obras de estas dimensiones es un sueño cumplido, que ahora va a compartir con todo aquel que se acerque a Ballobar para disfrutar del Bosque Ilustrado.