El Efecto Poe de Mariano de Meer, un relato "matemáticamente pensado" para el enigma

La segunda novela del escritor oscense ha sido presentada en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner en una escenificación "muy Poe" con José Perié

29 de Septiembre de 2023
Mariano de Meer presenta El efecto Poe en el Centro Manuel Benito Moliner

Mariano de Meer ha protagonizado una hilarante y a la par enigmática presentación de su segunda novela, El Efecto Poe, en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner donde ha estado acompañado por su amigo y profesional del Marketing José Perié, y el responsable de Imperium Editorial, Raúl Lahoz. El escritor ha desplegado su teoría sobre la composición literaria a la par que ha sugerido el valor del enigma siempre en la orientación hacia la intención del autor:  "Si a mí me interesa que el lector llore, que se apasione, que se ilusione, que pase miedo. Entonces, desde la primera página tienes que hacer que todos los elementos del relato vayan encaminados a conseguir ese efecto en el lector".

Incitado por el introductor, José Perié, Mariano de Meer ha conducido su discurso por los derroteros de su erudición y su libertad creativa. Esto es, ha contestado a la gallega pero ha desembocado en la disciplina con Perié. Ha recordado que, en las "Cartas a un joven novelista" de Mario Vargas Llosa, el peruano se dirige a quien quiere ponerse a escribir asegurando que las novelas, las narrativas, los relatos, "tienen tres grandes pilares: la idea que genera todo, la forma y la intención". En el Efecto Poe, nos encontramos a ese William Wilsons, el narrador que cuenta toda la historia. "La pregunta es la que al final de la novela va a poder responder uno, no antes, y sobrevuela toda la historia".

Aunque el creador de la novela asegura que no es sobre el coronavirus (más allá del lugar y el ambiente), ha afirmado que William Wilson es un rastreador de la covid. Es el 5 de febrero de 2020, la pandemia acaba de empezar y ha sido detectado el primer caso de coronavirus en la costa este de EEUU, es el octatvo de todo el país. Un director de un hotel que ha ido a Wuhan es el foco del contagio. Wilson rastrea y hace tres llamadas para un seguimiento de los contactos estrechos. Va a cumplir 40 años ese 5 de febrero. Es la edad que tenía Poe cuando fallece. El 29 de septiembre de 1849 aparece en la estación de tren de Baltimore. Nadie sabe por qué, desaparece, se le pierde de vista. Días más tarde, el 3 de octubre, aparece con otra ropa, rostro desencajado y diciendo incoherencias. Un amigo lo mete en un hospital y allí muere.

William Wilson empieza a descubrir cosas de sí mismo, un personaje con muchas carencias, que "tiene un gran vacío. Es un personaje mordido. que empieza a atar cabos, tiene bodegas oscuras en su alma, un agujero de recuerdos, un pozo a cuyo fondo no consigue llegar, pero con las llamadas empieza a conocerse. Esta novela es el enigma de este personaje, un puzzle, una sopa de letras, un crucigrama, una serie de trebejos colocados en un tablero de ajedrez que tenemos que aprender a observar y jugar esta partida".

Edgar Allan Poe escribe La filosofía de la composición, un ensayo en el que cuenta cómo se escribe un relato. "Viene a decir: en un relato, lo importante es el efecto que quiero conseguir en el lector. A mí me interesa que el lector llore, que se apasione, se ilusiones, que pase miedo. Entonces, desde la primera página tienes que hacer que todos los elementos del relato vayan encaminados a conseguir ese efecto en el lector".

Utiliza la metáfora del "clavo de Chejov". Si en la primera página de un relato pones un clavo que sobresale de una pared, es porque en la última página del relato alguien se va a colgar. "Poe dirigía todas las palabras al fin, al efecto. Decía que el relato tenía que estar matemáticamente pensado. Estamos hablando de Poe, de un genio romántico, en el que la originalidad, la genialidad, la inspiración parece que es la base de su  razonamiento y su praxis literaria. Pues aquí no, esto es matemático".

En el diálogo con José Perié, ha apelado a la "teoría del manuscrito encontrado", que dio pie a los libros de caballerías, al Quijote, al Lazarillo de Tormes, a La Familia de Pascual Duarte y a la carta de Stefan Zweig. "Esta novela es una carta, un informe de rastreo" con cuatro partes bien definidas referidas cada una a un personaje fundamental. "Edgar Allan Poe es un precursor en grandes géneros, de técnica muy depurada y que utiliza la segunda persona". Conceptos como la venganza, la pasión y otros estímulos se encuentran en su obra, en El barril de Amontillado", El gato negro o El Corazón delator. Un precursor de la utilización de las "matemáticas para la toma de decisiones. Poe lo supo 180 o 200 años antes, podría haber creado una ley educativa que se hubiera llamado la LOMPOE".

En la conversación ha surgido Hitchcock, sobre el que tanto influyó para su impulso cinematográfico Poe. Y el autor se ha remontado a sus tiempos en Boston, donde nació Edgar Allan Poe y muy cerca Emily Dickinson.

En el proceso creativo de El Efecto Poe se cruzaron distintas vicisitudes. Cuando estaba en plena composición, se atravesó La Lealtad o el Anillo, la primera novela sobre la que la editorial le recordó que estaba lista para el lanzamiento. Era 2020. Cuando retomó la novela de este 2023, se percató de que "no encajaba, por lo que tenía que volver a recuperar el tono, a leer y releer". La variante omicron del coronavirus se cruzó y tuvo un efecto fructífero: "Empecé a escribir cuando estaba confinado, no os podéis imaginar lo que se me pasaba por la cabeza en esas navidades de 2021".

Y ahí alló la virtud para armonizarse con el tono policíaco, de terror psicológico y de ciencia-ficción, como ha apostillado Perié. Mariano de Meer rezuma admiración por Poe, como lo hicieron Julio Verne o Arthur Conan Doyle ("si cada uno al que ha influido Poe pagara un tributo, se levantaría una pirámide más alta que la de Keops").

Aunque el autor afirma que El Efecto Poe es una historia que se puede leer de una sentada, el presentador afirma que en sus cuatro capítulos de estructura coherente "para este disparate" -el humor sigue sobrevolando-, "Mariano arriesga muchísimo, hay mucha audacia. Es complejo aunque contado de forma sencilla, cuando acabas tu cerebro está encajando las piezas".

Este ejercicio de magia literaria es ambicioso "porque me gusta retarme y desafiarme", ha asegurado Mariano de Meer quien contempla una posibilidad plausible de emprender una segunda parte.

LOS DOCUMENTOS GRÁFICOS

En la presentación, José Perié ha querido ambientar con la articulación de mensajes surrealistas, enigmáticos, sobrenaturales e incluso alguno lógico. En el "rastreo literario, en esta portada se ve lo que se necesita: reloj, portátil conectado a internet, un móvil, café, libros y papeles, muchos papeles".

Ha apelado al innovador violinista Tartini. "Una noche, Giusseppe Tartini soñó que el diablo interpretaba una cantata de violín y al despertar corrió rápidamente a tomar nota de lo que había escuchado. Acababa de nacer El Trino del Diablo. El escritor inglés Coleridge intuye una idea fina: imaginemos que soñamos, llegamos al paraíso y nos dan una flor para justificar que hemo estado allí y, cuando despertamos, la flor está con nosotros. ¿Entonces qué?"

Con intensidad, José Perié va exaltándose en su presentación. "Imaginemos que el creador de pesadillas Edgar Allan Poe, un día, andando por la calle, se encuentra con una de sus creaciones, una de su s pesadillas. ¿Entonces qué, qué pasa con el autor, es un loco, un Dios, un monstruo sin pasado como Frankestein? Tenemos que discurrir todos, como un río, porque en esta novela está omnipresente el río Charles, porque transcurre en Boston y en Boston, la cafetería, fue donde Mariano me dio este libro. Esto no puede ser casual".

Este libro tiene muchos secretos, ha agregado. "Documento gráfico: WW, William Wilson, le damos la vuelta y es MM, Mariano de Meer. No puede ser casualidad. Entre nosotros, yo ya sospecho de todos, ya no me creo que sea Mariano de Mer, y eso que hemos ido juntos desde la guardería. Esto es un enigma, un rompecabezas. Es que yo siento que ya he estado aquí, presentado otro libro distinto. Esto es un dejà vú".

La escenificación de este hombre revenido continúa. "Documento gráfico número 2. Edgar Allan Poe con 40 años. Este señor no puede tener 40 años. Esto es justo antes de morir. No tiene 40 años, tien más. Y qué pasó con Poe. Un 29 de septiembre nació Miguel de Cervantes, y Miguel de Unamundo. Y un 29 de septiembre Edgar Allan Poe entró en la estación de Baltimore, y se le pierde el rastro. Y nadie sabe qué pasa esos días, pero reaparece unos días después diciendo incoherencias, totalmente enajenado y dos días después muere. Y nadie sabe de qué muere o no nos lo quieren decir. Yo tengo una conjetura: Edgar Allan Poe. EAP. Enfisema Agudo Pulmonar. No puede ser casualidad. Es un círculo que se cierra".

"Documento gráfico número 3: el Uroboro, la serpiente que se devora a sí misma, la pescadilla que se muerde la cola, el dragón que se muerde a sí mismo, el eterno retorno, el eterno palíndromo, el ciclo de la vida. No puede ser casualidad. Una bola de billlar que golpea a otra bola de billar que esta quieta y la pone en movimiento, y esta a otra. Pero, ¿quién movió la primera bola de billar? El mito de Sísifo, la piedra que se lleva a la montaña y vuelve a caer. El esfuerzo inútil de la vida, sobre todo de la vuestra", agrega, mientras el auditorio se arranca en carcajadas.

El presentador incurre en la locura de Poe. "Este libro me ha dejado la cabeza regular", afirma José Perié. "No es que la hubieras tenido antes diferente", replica divertido Mariano de Meer. Y cierra para abrir el introductor. "Buenas tardes a todos, es un placer para mí presentar para el autor del efecto Poe".

LA EDITORIAL

Raúl Lahoz y Arancha Garcia configuran la pareja de editores de Imperia Ediciones, una editorial aragonesa con sede en Zaragoza, pero "llevamos cinco años en el mundo de la cultura y la literatura. Estamos muy contentos de nuestro trabajo, sobre todo teniendo escritores tan buenos y tan majos como Mariano de Meer".

Ha recordado que la primera experiencia con De Meer fue La lealtad o el anillo, y animó a repetir con El Efecto Poe.

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