Esther Ciudad, organista de la Seo de Zaragoza y artista que ha marcado hitos como ser la primera intérprete ajena a la iglesia en tocar el órgano durante la liturgia en el Vaticano -fue en agosto de 2021-, ha brindado este viernes un espléndido concierto en la Iglesia de San Vicente el Real de Huesca, organizado por la Cofradía del Corpus Christi y las Sagradas Formas de Salas de Huesca.
El órgano de San Vicente el Real el único instalado y mantenido en Aragón construido de Cayetano Estadella (1929, Barcelona) y uno de los pocos de su taller conservados en España, protegido además como Bien de Interés Cultural.
La organista ha llenado de una atmósfera ora mística, ora vibrante, la iglesia de la Compañía -como también es conocida- con un programa que se ha iniciado con la inspiración de Johann Sebastian Bach y sus obras Sin Tempo del concierto para órgano BWV 596 y la Fuga en sol menor. Ha dado paso a Mendelssohn-Bartholdy con la Sonata en Fa mayor, Op. 65 número 1 y de ahí a Josepf Rheinberger con Passacaglia de Sonata número 8.
El concierto iba alcanzando su climax y ha sonado vibrante con el Allegro de la Sinfonía nº 6 de Charles Marie Widor.
El colofón ha sido colosal, con Carrillon-Sortie del francés Henri Mulet, donde el órgano de San Vicente el Real ha lucido al máximo nivel en los movimientos variados y virtuosamente interpretados por Esther Ciudad. Un sentido aplauso ha despedido a la organista en su saludo en la iglesia, merecido homenaje a su calidad y su extraordinaria labor.