El sentido de la fiesta vive en el espíritu del ser humano y recoge las expresiones propias de la religiosidad, del sentido colectivo, de lo lúdico y de lo creativo, por lo que configura los signos más destacados de la identidad cultural y social de un grupo, un municipio o un colectivo.
Sobre esta base se ha creado la exposición Patrimonio de la fiesta y la música en Huesca, Siglo XII al XVIII, que contempla el patrimonio material e inmaterial, tanto profano como religioso, que esta tarde se inaugura en Huesca, a las 19:00, y este miércoles lo hará en el museo diocesano de Barbastro Monzón (10:00), el de Jaca (12:30) y el Museo Diocesano de Huesca (17:00).
La diputada de Cultura de la DPH, Maribel de Pablos, y la comisaria de la muestra, la historiadora del arte Carmen Morte, han presentado este proyecto, que se inscribe dentro del programa Signos, "que se puso en marcha con el objetivo de poner en valor el patrimonio de la provincia de Huesca", según ha recordado la primera.
Carmen Morte, que ha anunciado que es la última exposición que comisaría, ha observado que “el concepto de patrimonio cultural ha cambiado y ahora no solo son importantes las obras por su sentido estético o por su antigüedad, sino que hay también piezas pequeñas o de despoblados que fueron muy importantes en las celebraciones religiosas de su época y merecen su conservación y consideración”, como también ocurre con el patrimonio inmaterial y en este sentido se ha referido a las fallas del Pirineo, que se celebran en numerosos pueblos de la comarca de Ribagorza.
El discurso expositivo de la muestra se guía por los ciclos anuales, es decir, invierno, primavera, verano y otoño, así como por las festividades del calendario litúrgico.
Se han seleccionado alrededor de 200 obras de las tres diócesis de la provincia, Huesca, Jaca y Barbastro-Monzón, piezas de catedrales e iglesias parroquiales de casi 70 municipios altoaragoneses y también de museos y colecciones particulares.
Abarcan todos los campos artísticos, como escultura, pintura, tejidos, miniatura, grabados, hoy libros de canto, partituras un instrumentos musicales relacionados con cofradías, rogativas, procesiones y romerías, que tenían una importante participación ciudadana.
Morte ha explicado que la restauración es muy importante en esta exposición, porque se han destinado fondos a la recuperación de una veintena de obras, ubicadas, fundamentalmente, en parroquias o en museos diocesanos, “en lugar de traer obras del patrimonio emigrado”. También ha precisado que, por distintos motivos en los que ha preferido no entrar, no se han podido conseguir todas las seleccionadas.
Todo el contenido de la exposición se ha recogido en catálogo, junto a unas investigaciones relacionadas con el patrimonio material e inmaterial de la fiesta y la música en Huesca en este periodo de tiempo.
Y como la fiesta sin música no es nada, cómo ha indicado Carmen Morte, el proyecto se ha completado con un programa musical, que incluye una selección de conciertos incluidos en el 32º Festival del Camino de Santiago, entre los que se incluyen obras inéditas extraídas de las investigaciones de los archivos de las catedrales de Huesca Jaca y Barbastro.
LAS SEDES
En la Diputación Provincial de Huesca se desarrolla la secuencia de los ciclos festivos anuales y en el resto se ubica el contenido de las fiestas importantes y especialmente relacionadas con localidades de sus respectivas zonas.
En la Diputación de Huesca aparecen reflejadas las celebraciones festivas de invierno, primavera, verano y otoño, jalonadas por los Santos, y actúan como abogados protectores de ciertos colectivos o contra determinadas enfermedades.
Se dedica un espacio destacado a las imágenes marianas medievales, que responden a devociones locales de la figura de la Virgen de origen maravilloso y misterioso, cuyo culto está todavía vivo como es desde ondas romerías y procesiones. Se hace especial hincapié en la Virgen del Rosario y la Inmaculada Concepción.
En el Museo Diocesano de Huesca se muestran dos festividades religiosas universales de la tradición cristiana, la Semana Santa y la festividad del Corpus Christi.
En el Museo Diocesano de Jaca se exponen diversas partituras musicales, pinturas y joyas donadas en relación a Santa Orosia. También hay una representación de testimonios de los Caminos de Santiago.
En el Museo Diocesano de Barbastro-Monzón, se recogen dos fiestas de especial relevancia, el día de la Virgen de la Candelera y la festividad de San Ramón.