Huesca brinda un homenaje histórico a George Orwell: el café está servido

El Parque Miguel Servet acoge ya una escultura tributo al escritor, realizada por el artista oscense Javier Sauras

19 de Mayo de 2024
Homenaje histórico a Orwell en Huesca

El café está servido. Huesca ha vivido este domingo un día histórico, con un homenaje oficial a George Orwell, que cuenta ya con una escultura en uno de los espacios más emblemáticos de la capital altoaragonesa, el Parque Miguel Servet. Centenares de personas han asistido a este acto, algunas de ellas procedentes de países como Gran Bretaña, Irlanda, Suiza, Estados Unidos o Australia.

Así, 87 años después, se ha hecho realidad la promesa que hizo el autor de 1984, Rebelión en la granja y Homenaje a Cataluña, entre otras obras, y ha sido su hijo, Richard Blair, quien ha escenificado ese momento de tomarse una taza en la ciudad por la que su padre tomó las armas durante la guerra civil española.

Convocados por el Colectivo Ciudadano de Huesca, se han dado cita también representantes de la Orwell Society con su presidente a la cabeza, Quentin Kopp, el teniente de alcalde Iván Rodríguez, en representación del Ayuntamiento - la alcaldesa, Lorena Orduna, se encontraba en un acto en Tarbes-, la concejala de Cultura, Teruca Moreno, la presidenta de la Comarca de la Hoya, Mónica Soler, el autor de la escultura, Javier Sauras, otros ediles de la corporación y personas con especial protagonismo en este proyecto, cuyos nombres han ido saliendo a la palestra, a lo largo del acto. Además, Charo Ochoa ha actuado como maestra de ceremonias y Elena Torralba ha asumido la labor de traductora.

El acto ha se ha iniciado con el cuarteto de cuerda Muro Kvartet, que ha interpretado Bajo dos tricolores, de La Ronda de Boltaña, para dar paso a la firma del documento de donación de la escultura y de aceptación por parte del Ayuntamiento.

En total, han sido cuatro los ejemplares suscritos por Richard Blair, Iván Rodríguez y Juan Faci, del Colectivo Ciudadano, enrollados y atados con una cinta, mientras los músicos tocaban la canción popular "Anda jaleo, jaleo”, con arreglos de Federico García Lorca.

Momento en el que se procede a descubrir la escultura. Foto Mercedes Manterola

Después, ellos mismos han procedido a descubrir la escultura en homenaje a Orwell, que hasta ese momento permanecía cubierta con una bandera de Huesca. Luego, se ha procedido a meter, en la cápsula del tiempo, una copia del acuerdo de donación, enrollado con una cinta verde, prensa del día de Huesca e Inglaterra, monedas de curso legal de los dos países, matrices de los bonos que representan todas las donaciones recibidas, un ejemplar del libro Homenaje a Cataluña y folletos alusivos a la inauguración.

La escritora María Pilar Cavero ha querido también realizar una aportación personal y ha dedicado unas palabras a Orwell.

Charo Ochoa ha leído, a continuación,  una carta remitida por el presidente de la Fundación Andreu Nin, Enrique del Olmo, en la que se considera a Huesca como “una clara referencia en la recuperación de la Memoria”.

“Ahora que estáis viviendo el intento de borrar la historia que se perpetra con la denominada “Ley de Concordia”, se hace no sólo más necesario sino directamente imprescindibles las iniciativas ciudadanas como la vuestra, que fijan lo mejor de vuestra historia en figuras como George Orwell o Ramón Acin”.

“Orwell es un símbolo de la lucha contra los totalitarismos, y esto en el mundo actual es una permanente referencia y una continua enseñanza”, añade.

En nombre del Colectivo Ciudadano ha tomado la palabra Juan Faci, quien, entre otras cuestiones, ha recordado que la escultura tributo a Orwell ha sido un proyecto conjunto de esta entidad oscense y la Orwell Society, que apoyó la idea en momentos difíciles en los que parecía que no iba a pasar "de ser una quimera". Además, Richard Blair realizó una aportación "extraordinariamente generosa" y citó también la "magnanimidad" del Eton College, la prestigiosa institución inglesa en la que se formó Orwell.

Han destacado, no obstante, que han sido más de 500 las personas que han contribuido a su financiación, mediante la compra de bonos para una plataforma de microfinanciación con aportaciones a la cuenta del proyecto. "Orwell, más allá de ser en su momento un ardiente defensor de la legalidad republicana, incluso con las armas, es una de las figuras más destacadas de la literatura universal del siglo XX", ha recordado.

Ha dado las gracias también a los representantes del gobierno local, por entender que la presencia de esta escultura será "una aportación valiosa" y fortalecerá "el prestigio cultural" de la ciudad, y colaborar dando facilidades para colocar esta obra de Sauras.

Precisamente, para él han sido sus siguientes palabras de reconocimiento, "que ha hecho un trabajo magnífico con su bajorrelieve en bronce, sobrio y elegante, en el que ha sabido captar la personalidad de Orwell".

Aunque ha valorado el trabajo colectivo, Juan Faci ha destacado la labor del periodista y escritor Víctor Pardo, que ya en 2017 fue comisario de una exposición sobre este autor en el Museo de Huesca para conmemorar los 80 años de su presencia en el frente, y también es el autor de la conocida "Ruta Orwell".

"Él ha sido el alma de este proyecto, que sin su dedicación entusiasta y su trabajo incansable no habría visto la luz", ha asegurado.

ORWELL, EL ESCRITOR

Josete Martín Retortillo, en nombre de la asociación literaria Aveletra, ha proclamado que el acto de hoy celebra "un triunfo importante de la literatura, del arte, la victoria de la palabra escrita y publicada", asumida "con gran compromiso personal por la verdad, la objetividad, desde la independencia, por un autor extraordinariamente influyente y notable en su amplia obra, en su breve vida truncada por la tuberculosis".

Josete Martín-Retortillo. Foto Mercedes Manterola

Martín Retortillo ha recordado que Orwell es uno de los autores más importantes del siglo XX, dominaba diversos géneros y su obra rezuma "objetividad, claridad, sencillez, verdad y coherencia".

Ha añadido que su trabajo siempre buscaba defender la verdad y la liberad, era espático, coherente y honrado en sus posiciones intelectuales y políticas. 

Orwell advirtió de un futuro "poco a amable" y del poder sin límites. "Seamos libres y solidarios, sean libres ustedes, tengan cuidado con la policía del penamiento, tengan cuidado con el Gran Hermano, no pierdan nunca la alegría ni la libertad. Es una obligación", ha pedido.

"UN HOMBRE QUE PISABA BARRO"

Víctor Pardo ha sido el siguiente en intervenir y ha comenzado también destacando el trabajo en equipo que se ha realizado para que la escultura de 7,8 toneladas luzca ahora en el Parque Miguel Servet. Para ello, ha dicho, se han superado muchas dificultades, como suele ocurrir siempre que se lucha por el patrimonio local. 

"Así, la primera peculiaridad de esta obra es precisamente el carácter ciudadano, cívico, inherente a su gestión, pero sobre todo a la financiación. Cientos de personas, ha quedado dicho, han participado en el proyecto apoyando económicamente una buena idea. Ya lo logramos con la pajarita colocada en la casa de Ramon Acín y Concha Monrás en la calle de Las Cortes en 2004 y también con el memorial que en el antiguo cementerio civil recuerda a las víctimas de la represión franquista en Huesca", ha apuntado.

Ha recordado que George Orwell vino a España en calidad de periodista el 26 de diciembre de 1936, "un hombre que pisaba el barro, sentía en su pulso el de la sociedad de su tiempo y no eludía el compromiso, lo asumía con todas sus consecuencias".

Asistentes al acto en el rincón de Orwell del parque Miguel Servet. Foto Mercedes Manterola

Orwell, ha proseguido, "era un antifascista militante y su contacto con la realidad española hizo que, sin dudarlo, cambiara la pluma por el fusil y se alistara como miliciano en la columna del POUM para defender la legalidad republicana. Compromiso que lo llevó al frente de Los Monegros primero y al cerco de Huesca después".

En España se libraba la primera batalla contra el fascismo que se abría paso en Europa –Italia, Portugal o Alemania estaban siendo igualmente estranguladas por el terror y la barbarie– y el autor de Homenaje a Cataluña, obra memorialista que bien podría haberse titulado «Homenaje a Aragón», enfrentaba la situación en primera línea, arriesgando su vida que, además, a punto estuvo de perder el 20 de mayo de 1937 en el asedio a Huesca. "Una bala atravesó limpiamente su cuello y por milímetros no le causó una muerte fulminante. «Fue –escribió– más o menos como estar en el centro mismo de una explosión». Mañana se cumplirán 87 años de aquella experiencia trascendental".

Para Orwell, ha afirmado Pardo, la guerra constituyó el acontecimiento más importante de su vida, y aun con todo lo conocido y sufrido admitió que sentía más fe que antes en la honradez de los seres humanos".

"Hoy, domingo 19 de mayo, estamos celebrando un acto de memoria. Un acto de memoria histórica y democrática que tiene como eje principal a un hombre honrado que buscaba la verdad y defendía la libertad. Un hombre que se hubiera opuesto con toda la fuerza de su escritura y pensamiento crítico a la derogación de la Ley de memoria democrática", ha sostenido.

"Un hombre que ahora que la ultraderecha se pasea por las instituciones –Aragón y Huesca son ejemplos paradigmáticos– con impunidad y chulería propia de matones de barrio, rompiendo consensos y sembrando odio, hubiera estado a favor de las tesis de los relatores internacionales de la ONU en su defensa de los Derechos Humanos, de los postulados innegociables de verdad, justicia y reparación", ha agregado Pardo.

El periodista y escritor quiso enumerar su propia lista de agradecimientos y entre otros citó a Judith Keene, Raúl Benito, los amigos de La Anónima, Ana, Marta y Chema, Jesús y Ludi, de Masdelibros, la diseñadora Marta Ester, Miquel Berga, Fernando Casal, Antonio Escartín, la bibliotecaria Sarah Aitchison, la profesora Elena Torralba y a Charo Ochoa.

Víctor Pardo, junto a Pilar Calvete, nombrado miembro honorario de la Fundación Orwell. Foto Mercedes Manterola

VÍCTOR PARDO, SOCIO HONORÍFICO

Richard Blair ha asegurado sentirse "muy honrado y emocionado" ante esta "maravillosa ocasión" que ha supuesto el tributo a su padre en Huesca, un reconocimiento "por su relato veraz cuando escribió Homenaje a Cataluña".

En este logro, ha destacado el "esfuerzo incansable" de Víctor Pardo, además de agradecer a la alcaldesa y el Ayuntamiento que hayan prestado su ayuda y proporcionado este "maravilloso" lugar del parque, a Javier Sauras por su escultura, a la alcaldesa de Huesca y el ayuntamiento que han ayudado y organizado este magnífico lugar y a todos los que han colaborado con su generosidad.

Quentin Kopp, por su parte, ha sorprendido a los asistentes con el anuncio del nombramiento de Víctor Pardo como miembro honorario de la Fundación Orwell, en la que sólo hay una persona que ostente este honor, el profesor Peter Davidson. De esta manera, se valora su trabajo durante décadas, tanto en la Ruta Orwell como con este proyecto. 

Kopp ha subrayado que, posiblemente, Pardo no habría podido acometer toda esta tarea sin el acompañamiento de su esposa, Pilar Calvete, cuya presencia ha sido requerida.

El teniente de alcalde, Iván Rodríguez, ha disculpado la ausencia de la alcaldesa, que se encontraba en un acto oficial en Tarbes, y ha comentado que en un mundo donde se anhela la paz y la libertad, es fundamental recordar los valores de hermandad entre pueblos y personas de distintos orígenes. A pesar de las aspiraciones universales por una vida plena, muchos habitantes de la Tierra aún viven en condiciones adversas. Europa, que ha alcanzado la democracia tras una historia de conflictos y guerras, se encuentra nuevamente asolada por la guerra, llevando a la destrucción y la muerte.

Rodríguez considera que la verdad, que debería ser el pilar de nuestras sociedades, está siendo manipulada, y se ha dejado de buscar con honestidad. Según ha dicho, actualmente, existe una tendencia preocupante donde incluso las personas bien intencionadas no distinguen entre la verdad y la mentira, y prefieren conformarse con una visión del mundo influenciada por ideologías y propaganda.

Este fenómeno lleva a que la intolerancia crezca, dividiendo nuestras sociedades, por lo que considera crucial que los intelectuales y todos aquellos comprometidos con la verdad mantengan su búsqueda, resistiendo la manipulación y el relato sesgado.

La construcción de una sociedad basada en la búsqueda de la verdad es un objetivo noble, ha añadido, al que nadie que aspire a una vida virtuosa debe renunciar.

Terminados los parlamentos, se ha procedido a enterrar la cápsula del tiempo y se ha procedido a un intercambio de regalos. Tanto Blair como Koop ha declarado sentirse muy emocionados cuando han recibido como presentes unas pajaritas de Ramón Acín.

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