En la reivindicación del Santo Grial como Itinerario Cultural Europeo, en la búsqueda de identificar sus territorios desde el origen del Santo Cáliz hasta Valencia pasando por el fundamental trazado oscense, en la proclamación de las posibilidades culturales y turísticos de esta ruta, viene a dar luz y presencia universal la plataforma Netflix que ofrece a decenas de millones en todo el mundo el documental "Misterios de la fe".
Es el sueño que el 21 de febrero contaban a EL DIARIO DE HUESCA la valenciana de raíces aragonesas Cristina Monzón y el argentino afincado en Valencia Alejandro Martínez-Notte. Camino al andar, han sido seleccionados por Netflix para mostrar al mundo el Camino del Santo Grial, que recrea los pasos que debió seguir el Santo Cáliz desde su entrada a España por Somport hasta su llegada a la catedral de Valencia.
Los dos peregrinos, profesionales de la comunicación con especialización audiovisual, han realizado en etapas los 650 kilómetros que separan Huesca de Valencia mientras comparten su experiencia en redes sociales (Teleaire.com), demostrando de esta forma que esta ruta no es una entelequia sino una alternativa real.
Para Alejandro, embebido de la atmósfera mágica de tantos parajes religiosos y profanos que ha conocido, recorrer este camino está siendo una oportunidad única de descubrir España, en concreto Aragón y la Comunidad Valenciana. “He tenido el privilegio de conocer más de cien municipios españoles a través de un turismo slow y consciente que me ha conectado con el maravilloso legado cultural y paisajístico que tienen ustedes”.
Cristina afirma que se siente orgullosa de que la historia del Santo Cáliz de Valencia se difunda a escala mundial. “Tenemos la esperanza de que Netflix pueda ser el detonante que inspire a miles de peregrinos a viajar la Comunidad Valenciana y Aragón para conectar con la energía del Amor, el Diálogo y la Concordia”. Cristina que ha hecho dos veces el Camino de Santiago, sostiene que ésta es una ruta de expiación de los pecados, mientras el del Santo Grial es una peregrinación que conecta con la Regla del Amor Universal.
Ese sentido espiritual que acompaña en sus creencias a Cristina ha contagiado a Alejandro, aunque admite el hispanoargentino que no ha sido fácil. "Nos hemos encontrado con tramos sin señalizar y esta sería la primera reivindicación que pedimos a los políticos, sin embargo la aventura ha valido la pena".
Tiene además la virtud esta ruta de acercar a dos comunidades hermanadas históricamente: Aragón y Valencia. Si el Camino de Santiago es la peregrinación del eje atlántico, "estoy convencida de que el Camino del Santo Grial puede convertirse en la peregrinación estrella del eje mediterráneo. Creo que con el desarrollo de ambos caminos, España puede llegar a ser el destino europeo por excelencia del Turismo de Peregrinaciones, apunta la valenciana, que además de peregrina es técnico en turismo".
La serie de Netflix incide en las evidencias arqueológicas e históricas que avalan la veracidad del Santo Cáliz de Valencia, la única pieza que pudo estar sobre una mesa judía en la Pascua del siglo I, ya que es la única que supera todos los filtros “kosher” y de exigencias del ritual hebreo. Estos descubrimientos permiten traspasar la línea de la fe y anclar el relato del Santo Cáliz de Valencia en el rigor científico.
Aluden a los estudios de la doctora Ana Mafé, que afirma en su obra que el Santo Cáliz de Valencia es una auténtico “kosh kidush” o lo que es lo mismo, una copa de bendición judía coetánea a los tiempos de Jesús. Esta constatación ha llevado a la Santa Sede a declarar a Valencia ciudad jubilar cada cinco años y a perpetuidad, colocando a la ciudad del Turia en el mismo estatus que Jerusalén y Roma y por encimad de Santiago de Compostela, que solo celebra su jubileo cuando el Santiago se celebra en domingo.
Misterios de la Fe en Netflix constituye una ocasión para universalizar el conocimiento del Santo Cáliz de Valencia y su camino de peregrinación, con un contenido espiritual básico: el Amor Fraternal, el Diálogo interreligioso y la Concordia, tal y como propuso su legítimo propietario: Jesús de Nazaret. Una huella de "descarbonización" no sólo ambiental, sino también del pensamiento universal.