El Pirineo oscense es uno de los “lugares favoritos del mundo” de Rozalén. La cantante albaceteña considera que “quien no lo conoce se está perdiendo algo demasiado valioso”, y este jueves ha revelado en Huesca que este territorio también ha sido fuente de inspiración para sus temas musicales.
Y, de entre todos los parajes que le han robado el corazón, se queda con el valle de Bujaruelo, que es el prado verde en el que despertó al cruzar “La Puerta Violeta”, título de uno de sus temas más aclamados.
La artista, que ha recogido este jueves, en la sede de la Diputación de Huesca, el Premio Música e Integración del Festival Pirineos Sur y este viernes actuará allí, ha recordado que aquel lugar le hizo sentirse a gusto en un momento complicado de su vida.
También siente una conexión muy especial con Pirineos Sur, donde años atrás veía muchos artistas que le gustaban. Fue precisamente un modesto festival, en aquella ocasión de cantautores, lo que le trajo por primera vez a este país de montañas y se enamoró “un poquito”.
Encuentra vínculos entre su comunidad, Castilla La Mancha, especialmente la Sierra del Segura, y el Pirineo oscense, por su orografía y sus valores. Se ha pateado muchos senderos de la provincia de Huesca y ha disfrutado de su gastronomía.
En julio de 2020, como la pandemia le impedía trabajar, regresó de nuevo para pasar unas vacaciones y le ocurrieron muchas cosas “mágicas” como conocer a la Ronda de Boltaña. Le conectaban con sus ancestros y le hacían sentir bien. La gente con la que se cruzaba le trataba “con un amor brutal”. Rozalén asegura que aquí se siente como en casa y le parece normal que la gente se siente orgullosa de su tierra.
Rozalén acudió a un ensayo de la Ronda, porque procede del folk y toca la bandurria desde los 7 años, y además su abuelo paterno formó parte de la 43 División y vivió la Bolsa de Bielsa, que aparece en algunas de las canciones de la formación musical sobrarbense. Después, grabaron juntos “La tumba de la golondrina”, que han vuelto a interpretar este jueves en su reencuentro en Huesca. Los lazos que han creado son “para siempre”. Y así ha resonado por toda la casa de la institución provincial.