Es uno de esos tantos futbolistas que se tiene que ir a buscar el pan lejos del club que posee sus derechos. Es Ángel Pérez Hidalgo, lateral/extremo de la SD Huesca B pero cedido desde el pasado verano en el Rayo Cantabria, el filial del que ahora mismo es líder en LaLiga Hypermotion. Sin duda, Pérez está siendo una de las sensaciones de la Segunda RFEF. Sus números hablan por sí solos: es el máximo anotador (6) y el máximo asistente (4) de su equipo, a pesar de que en las últimas temporadas viene jugando como lateral o carrilero.
En su llegada a Huesca, formó parte del Huesca B de Sebas Martínez en Tercera. Aquel equipo que tuvo opciones hasta el último suspiro de ascender a Segunda RFEF, en el último partido de la temporada que dio el premio final a la UD Barbastro. Anteriormente se crió en el fútbol zaragozano, en su ciudad natal, y de Montecarlo firmó por el Cuarte, en Tercera, antes de subir un poco más al norte para enfundarse la zamarra azulgrana.
El futbolista atiende a EL DIARIO DE HUESCA para hablar de su buen hacer por tierras cántabras, y recuerda en primer lugar cómo se dio su salida el pasado verano de la estructura del Huesca: "Yo quería jugar en unas condiciones en las que a mí me vinieran bien. Se me presentó la oportunidad del Rayo Cantabria. Después de estudiarlo, me transmitieron la máxima confianza y estoy súper agradecido". De hecho, tuvo la oportunidad de jugar varios partidos de pretemporada con el primer equipo cántabro el pasado verano.
Es la segunda temporada del zaragozano en Segunda RFEF, ya que el curso pasado defendió los colores del Utebo FC. "Me costó adaptarme más, ya sea por el grupo o por los terrenos de juego. En el grupo en el que está el Utebo hay campos más pequeños y de césped artificial; es más costoso. Aquí tengo más espacio y todos los campos son naturales. Me viene mejor para mi juego", señala.
Pérez está cedido por el Huesca hasta final de temporada, y el jugador confiesa que no sabe hasta cuándo se extiende su contrato con la entidad altoaragonesa. "No he recibido llamadas de nadie del Huesca, pero tampoco quiero recibirlas. Me dedico a jugar y estoy contento. Lo que tenga que ser será. Para eso están los representantes. Salgo al campo para intentar hacer número el fin de semana. Lo externo no depende de mí".
El zaragozano ha tenido que salir cedido al igual que otros nombres propios como Sergi Armero, Diego Aznar o Manu Rico. Con Sergi no coincidió en el filial pero con Manu y con Diego sí. De hecho, en Liga Nacional Juvenil compartió equipo con Diego en el Montecarlo. "También tienes que demostrar que vales, y si hay que hacerlo en otro lugar, pues es lo que toca".
Volviendo al presente, dice que "nos hacían falta estos tres partidos para demostrar que somos un equipo serio, pese a ser un filial. Tenemos un reto difícil esta semana en Los Pajaritos". En estos momentos, el Rayo Cantabria vive su mejor momento del curso tras tres victorias consecutivas, y ya suma 21 puntos en su casillero. El liderato lo tiene a tan sólo cinco puntos de distancia.
"Me encuentro muy bien. Mi estado de ánimo, tanto mental como físico, es bueno. El entrenador me está dando mucha confianza y eso se traslada al terreno de juego. Estoy muy a gusto aquí desde el primer día porque me mostraron confianza. No ha sido nada en falso", asevera.
Este domingo, al Rayo le espera una salida complicada hasta Soria. Allí se medirá al Numancia, en Los Pajaritos, un estadio que siempre motiva a cualquiera que se calce las botas para jugar en él. "Es un reto bonito. No todos podrán sacar puntos en ese estadio. Ya tuve la suerte de jugar allí el playoff con el Utebo contra el Numancia, y será un reto bonito. Seguro que lo sacamos adelante".