Bien podría ser un capítulo de la serie televisiva "El equipo A". A Dani Martínez le gusta que los planes salgan bien. Llegó a Barbastro el pasado mes de octubre con el único objetivo de no caer a Tercera RFEF, y finaliza la temporada con tres eliminatorias absolutamente históricas de Copa del Rey además de haber conseguido, de forma holgada, la salvación de categoría. Junto con sus chicos, su "equipo A" formado por Javi Urrea, Chus Herrero, Josemi Blanco y Mario Franco, borró de un plumazo a la Ponferradina y a todo un Almería de Primera División. El premio gordo, sin duda, fue el FC Barcelona, que visitó la capital del Somontano en el evento deportivo más importante de la historia de la ciudad.
El entrenador de Almudévar ha cuajado tres temporadas para enmarcar. En su primera andadura en la categoría logró una histórica salvación con el CD Brea. No contento con ello, decidió subir la apuesta: se quedó en el banquillo de Piedrabuena y volvió a dejar al equipo en Segunda RFEF. En resumen, son tres campañas consecutivas dejando a un equipo en la cuarta categoría del fútbol español.
Pregunta: ¿Cansado?
Respuesta: Sí, bueno. La realidad es que aunque empezara a mitad de octubre ha sido una temporada muy intensa y de muchas emociones. Es una situación histórica donde hemos vivido muchas cosas bonitas y eso es muy difícil en el fútbol. En este deporte pasan más cosas malas o desagradables que buenas. Ha sido una temporada de ensueño.
Llegó en un momento complicado, con el equipo en descenso. ¿Qué es lo que más le costó?
En el periodo en el que no estuve entrenando vi mucho fútbol. Al Barbastro también en directo, así como a otros equipos. La labor fue introducir alguna variación táctica que veía que hacía falta. Creía que el equipo estaba un poco descompensado en algunas posiciones. La mayor tarea, es verdad, es la psicológica. Es cierto que con la llegada de un nuevo entrenador el jugador se conecta más porque está más alerta de lo que pide. Creo que el equipo merecía haber conseguido alguna victoria. Desde el primer día, el equipo trabajó de maravilla y, de hecho, en el primer y segundo partido conseguimos victorias importantes. El equipo creyó en el trabajo.
¿Qué nota le daría a la temporada?
Yo creo que es de 10. En la situación compleja en la que llegamos, con tres puntos después de seis jornadas, quedar como se ha quedado... Lo de la Copa del Rey, es algo difícil de repetir. Conseguir la permanencia con dos jornadas de antelación y con la guinda de conseguir la clasificación para la Copa del Rey de la temporada que viene.
¿Cuál ha sido el momento clave de la temporada? ¿Quizás el bajón que sufrieron con tantas jornadas sin victoria?
Ni cuando pierdes eres tan malo ni cuando ganas eres maravilloso. Es verdad que en la primera vuelta conseguimos una buena racha de resultados donde el equipo estuvo a más del cien por cien. Era normal que pudiéramos pasar un bache. En ese bache, sabíamos internamente que el equipo estaba bien. Analizando los partidos las sensaciones eran buenas. En esa fase de cinco empates merecimos ganar. Recuerdo que en Calahorra hicimos un partidazo y perdimos. Siempre competíamos y el equipo no bajó los brazos. Llegamos a Náxara, ganamos y en estos dos últimos partidos el equipo todavía se ha visto más suelto a nivel competitivo.
En los primeros 14 partidos con usted en el banquillo el equipo logró 10 porterías a cero. 26 puntos de 42 posibles. Ha sido una de las claves crecer desde lo defensivo.
Cuando llegamos, uno de los problemas que había es que no se cerraba la portería. Se podía generar pero era importante cerrar la portería. Es cierto que contra el Alavés encajamos dos goles pero logramos la victoria. El equipo ha trabajado muy bien defensivamente. Y ofensivamente hemos crecido a medida que pasaban las jornadas. En todos los partidos generábamos muchas ocasiones. Hemos ido creciendo.
¿Quitando el resultado, con qué partido se queda de toda la temporada?
Creo que uno de los partidos donde me quedé muy satisfecho fue en la visita a Logroño. También cuando recibimos al Athletic B. Ambos quedaron en empate pero supieron a victoria. Hicimos dos grandes partidos ante dos de los mejores rivales de la categoría. El penúltimo partido contra la Real Sociedad creo que fue el mejor partido que hicimos de la temporada. El equipo mostró un gran nivel de juego. Luego, los de la Copa, qué decir. Todos son especiales porque competimos de maravilla.
Ha tenido que lidiar con lesiones y bajas después de un mercado invernal en el que se realizaron pocos refuerzos.
Es verdad que en el marcado de invierno salieron jugadores en el último momento. Hubiéramos preferido que fuera de otra manera para tener algún margen para fichar. No se pudo y nos quedamos con 19 jugadores en una plantilla un poco corta. Sabíamos que podía ocurrir y había que sacar el máximo partido a lo que hay. Las cosas se dan como se dan, pero la unión del grupo ha hecho que todas esas situaciones tan complejas lo hayamos llevado de la mejor manera.
En lo personal, ha logrado tres salvaciones consecutivas en Segunda RFEF. El palmarés es exquisito.
La verdad es que no me puedo quejar. Han sido tres años muy buenos; los dos primeros de Brea muy intensos en un contexto difícil. Luego, llegar otra vez a Barbastro en esta segunda etapa en una situación tan compleja. Era una situación de riesgo, pero decidí aceptar el reto. Ha salido todo perfecto.
Podemos decir que a Dani Martínez le gustan los retos.
Así es. Todo ha sido muy complejo. Pero ante tantas adversidades, a nivel personal y deportivo, aun te exiges más. Ahora no soy el mismo que hace tres años y he mejorado en muchísimas cosas. Me he tenido que exprimir y la verdad que estoy contento por toda la gente que he conocido y con la que he trabajado. Ha sido un crecimiento muy grande a nivel deportivo.
¿Qué va a ser de su futuro? ¿Tiene tomada alguna decisión?
Ahora, lo primero que tengo que hacer es descansar. Las temporadas son muy difíciles y hay mucho estrés, tanto en lo deportivo como en lo extradeportivo. Hay que disfrutar de los logros. Creo que es una temporada histórica para el Barbastro. El futuro no lo sé. Primero, el club tiene que hacer la Asamblea y decidir cuál es el camino. Está todo en el aire.