David Timor, uno de los pesos pesados del vestuario de la SD Huesca, ha sido el encargado de hablar este viernes ante los medios de comunicación tras la primera de las dos sesiones de entrenamiento que el equipo azulgrana completará en el día de hoy. Y lo ha hecho a muchos días del choque ante el Albacete (lunes 9 de enero, 21:00h), pero sabedor que es un momento de "adaptación después de ocho días sin entrenar con el grupo. Porque no es lo mismo hacerlo de manera individual que con los compañeros. Vamos cogiendo sensaciones otra vez. Hemos parado ocho días pero nos mandaron trabajo para hacer en casa. Somos profesionales y hacemos lo que nos mandan para estar en condiciones porque luego si no se nota".
El centrocampista, que también ha actuado esta temporada en varias ocasiones como defensa central, ha disputado 19 partidos, 14 de ellos como titular. Solo Andrés Fernández (21), Ratiu (20) y Kento (20) han jugado más que el de Carcaixent. Es autocrítico y ha dejado claro que hay que "mejorar los registros fuera de casa". Por el contrario, en casa hay que "intentar seguir como estamos". El fútbol y su estado de ánimo hace que simplemente se desconozcan las causas. "No sabría decir qué ocurre. Al final, todos los equipos son más fuertes en casa. Hay que darle una vuelta".
Ha echado la vista atrás para recordar la crueldad con la que se escapó un punto en la visita a Albacete. "Logramos empatar con uno menos pero en el minuto noventa y pico te ganan en una jugada de centro. Hay que intentar ganar y sacar adelante el golaverage porque puede ser importante". Marc Mateu y Jorge Pulido están con el grupo y eso es un buen síntoma para todos. "Llevamos recuperando a gente y eso es mucho mejor para todos. Cuanta más competencia haya, es mejor para todos". Timor no ha querido hablar de posibles llegadas ni tampoco salidas. "No es un aspecto que nos tenga que incumbir a nosotros, nos centramos en trabajar".