Décima jornada de la Leb Plata disputada en el Palacio de los Deportes de Huesca en lo que comenzó siendo una mañana festiva de baloncesto con la mini liga de la cantera y el almuerzo y terminó con una amarga derrota. Casi siempre a remolque y sin acierto el ataque, el Lobe Huesca La Magia cayó ante el filial de Gran Canaria en un partido parejo pero que se decantó en el último cuarto (64-73).
Le costó cerrar al Peñas la defensa en los primeros compases y es que Gran Canaria anotaba con demasiada facilidad. A eso se sumó que N’Guessan pasó demasiado desapercibido en ataque. En la pintura, se apagaba la luz. Rubín de Celis anotó el triple que puso en ventaja a los locales por primera y única vez antes del descanso. Era un choque igualado en todo momento que terminó con empate a 17 tras el primer cuarto.
No acababa de estar cómodo el Peñas. Además, se encontró con un negado Germán Kasanzi que duró muy poco en pista en el inicio del segundo cuarto. Perdió dos balones en dos ataques consecutivos y tal y como salió, Cerdán lo mandó de nuevo al banco. Lafuente sí que estuvo certero desde los tiros libres tras una antideportiva visitante. Los altoaragoneses encontraron tiros liberados pero en primera instancia no entraron. Yarnoz fue el único que pareció encontrar el camino desde la línea de tres. Pero el que dio un clínic desde el exterior fue De Celis. Aún así, sus compañeros no ayudaban y tan solo veían cómo Gran Canaria mantenía una escasa renta, pero al fin y al cabo, renta. Un breve arreón del Peñas al final del segundo cuarto dejó en un 37-37 el marcador al descanso.
Empezó de nuevo con desventaja al conceder un triple pero supo rehacerse. El partido seguía sin un claro dominador y es que ambos iban a llegar con mucha vida al último y decisivo cuarto.
Se atascó el Peñas en la recta final del tercer cuarto. Los árbitros tampoco ayudaron; Lafuente pedía explicaciones sobre la pista y el público silbaba con fuerza tras una falta pitada sobre Redondo. Fernández se marchó con ayuda de la pista por una torcedura en el tobillo. Se nubló la vista en ataque para los peñistas que no encontraban las soluciones. Daba la sensación que había que hacer demasiadas cosas bien para llevarse el partido.
No estuvo acertado N’Guessan en la raya de los tiros libres y los árbitros volvieron a desquiciar a los locales. “¡Qué barbaridad!”, se escuchaba desde la grada. Al final, victoria de Gran Canaria ante un Lobe Huesca desacertado que no le acabaron de salir las cosas de cara.
Cinco inicial: Lafuente (7), N'Guessan (14), Yarnoz (8), Adom (10) y García (7)
Rodríguez, Kasanzi, Stosic (2), Rubín de Celis (16)