“Me ha costado dormir, tenía dolor de piernas”, ha comentado Elena Guiu en la “dulce resaca” que ha tenido tras la medalla de oro lograda este sábado en el Campeonato de España Sub-23 que suponía también su entrada triunfal en la categoría. Lo hacía además con mejor marca personal, 7.36, que servía para pulverizar el récord de Aragón que ella misma tenía con los 7.39 del año pasado. Se quedó a solo dos centésimas del récord del campeonato y se coloca tercera del ranking nacional absoluto, solo superada en este momento por Jael Bestué (7.30) y Maribel Pérez (7.31).
“Me notaba muy bien, afrontaba el campeonato con muchas ganas porque con los entrenos que estaba haciendo, sabía que estaba para correr”, ha señalado la velillense del Valencia. Poco a poco fue amasando la victoria. “En la primera carrera, por la mañana, salí bien y controlé. Se ve que me quedé con ganas. Y antes de la semifinal me notaba revolucionada. Me dijeron que tenía que aprovechar la carrera. Hice muy buena salida pero no acabé de rematar pese a que mejoré la marca”.
La final, sobre todo al comienzo, fue no apta para cardíacos. “Me notaba cansada, apenas habían pasado dos horas de la semifinal y eso las piernas lo acusan. En la salida me quedé en los tacos, sabía que la que estaba a mi lado tenía muy buena salida, las tuve a todas delante por un momento, pero una vez lanzada hice muy buena progresión para llevarme la victoria”, ha explicado.
Se sonríe cuando recuerda lo “infartante” de ese momento en el que parecía rezagada. “Hay que darle emoción”. Pero “confiaba mucho en mis condiciones, en mi potencia y en el buen momento de forma que tengo. Los primeros apoyos me cuestan, pero luego en el lanzado voy muy bien”.
También este oro le ha servido para quitarse la espina que le quedó clavada el año pasado en el campeonato Sub-20 cuando por una mala salida y por milésimas tras la reacción se quedó con la plata. Al final, “ves que el trabajo merece la pena. Son solo siete segundos, pero los disfrutas porque sale todo”.
La temporada es ya imparable. El próximo fin de semana, de nuevo en Antequera, Elena Guiu disputará con el Valencia la Copa de España de clubes de pista cubierta. Y sin tiempo para descansar, siete días después, estará en Ourense para afrontar el Campeonato de España absoluto. “Claro que hay margen de mejora. Si consigo una buena salida y después apretar o si tengo a alguien por delante que vaya tirando y pueda engancharme, la marca puede ser más buena. Eso es lo que hay que trabajar, sobre todo las salidas”.
A nivel internacional, y en esta temporada de invierno, está el Mundial de pista cubierta. La mínima que le piden es de 7.27 como Sub-23. “Imposible no es. Nunca se sabe lo que puede pasar. Veo que tengo margen de mejora y me noto bien. Voy a dar todo lo que tengo, pero tampoco me voy a comer la cabeza con eso. Es mi primer año Sub-23 y soy de las más jóvenes”.