El Estadio de El Alcoraz dispondrá en breve de la licencia ambiental expedida por el Inaga (Instituto Aragonés de Gestión Ambiental) después de que los técnicos del Ayuntamiento de Huesca y de la Sociedad Deportiva Huesca (con el arquitecto Ignacio Lacarte además de los servicios jurídicos) hayan completado la documentación a falta apenas de un trámite consistente en un plano de luces de una zona del recinto.
Se cerrará, de esta manera, un tedioso asunto en el que se mezclaron dejaciones en el Ayuntamiento en la anterior legislatura, en el club y, al final, muchos nervios por la amenaza revelada de suspensión del Huesca-Espanyol después de que, en realidad, la primera advertencia llevada con discreción fuera para el Huesca-Eldense. Junto a estas circunstancias, tensiones entre los técnicos municipales y los servicios jurídicos y técnicos de Camino del Cocorón y, tras llegar al límite de las discrepancias, se recondujo la situación. El encuentro se disputó bajo el compromiso de la Sociedad Deportiva de cumplimentar los trámites.
La licencia ambiental representa una exigencia cuando, como es el caso, se ha producido una reforma sustantiva en una instalación, como sucedió hace más de un lustro en el Estadio de El Alcoraz, lo que obliga a presentar la documentación renovada respecto a la original de la construcción hace más de medio siglo.
En el origen del conflicto, un decreto del anterior alcalde, Luis Felipe, en mayo de 2023 que conminaba a presentar la nueva licencia y que no fue respondido por la Sociedad Deportiva Huesca ni vigilado por el propio Ayuntamiento para su ejecución. La nueva corporación, y particularmente su alcaldesa, que se interesa por las instalaciones de concurrencia pública de la ciudad tras la tragedia de Murcia (con 13 muertos en una discoteca) y descubre el incumplimiento del decreto de su predecesor.
A partir de ahí, comunicaciones que exhortan a la tramitación obligatoria y búsqueda de soluciones desde las instituciones para evitar un conflicto grave e indeseado fruto de obvias negligencias (con consecuencias internas incluso en el club). Ahora sí, se aproxima un final feliz y los jugadores de Antonio Hidalgo podrán marcar goles en un estadio plenamente legalizado.