Huesca y Cádiz no se veían las caras en El Alcoraz en Segunda División desde el 24 de junio de 2020. Esa fue la última comparecencia de un equipo que luchó hasta final -en plena pandemia de covid- con el Huesca por subir esa misma temporada a Primera División. Curiosamente, tanto oscenses como gaditanos acabaron logrando su objetivo de regresar a la máxima categoría del fútbol español. El Huesca se alzó con el título liguero (70 puntos) y el Cádiz quedó segundo, con un punto menos (69).
Ese partido de 2020 terminó en empate a uno después de los goles de Okazaki para el Huesca y de Álex Fernández, de penalti y en el 97', para el Cádiz. Sin duda, un mazazo gordo para las aspiraciones azulgranas, que veían cómo el ascenso se ponía más complicado cuando faltaban todavía siete partidos por disputarse.
En el enfrentamiento en Primera, en ese mismo año, el Cádiz se llevó el triunfo por 0-2 con goles de Negredo y Pombo. Ahora las cosas han cambiado. El Huesca llega por encima en la clasificación después de un arranque con dudas de los amarillos. Tienen nueve puntos, tres menos que los azulgranas.
El Cádiz perdió su último partido ante el Eldense (1-2), sumando así su segunda derrota de la temporada. Sus victorias a domicilio han sido dos: ante el Castellón (1-3) y frente al Cartagena (1-2).
Paco López tiene a su disposición a un plantillón con todas las letras. Practicamente cuenta con la misma estructura que compitió el curso pasado en Primera. Arriba, su principal amenaza es Chris Ramos, un delantero muy potente que ya suma cuatro goles en siete partidos.
Sin duda, el Huesca tendrá que hilar muy fino para no cometer errores que permitan al Cádiz encontrar rendijas en El Alcoraz para el camino del gol. Los de Hidalgo todavía no han conseguido dejar su portería a cero en El Alcoraz esta temporada, por lo que la de este viernes se antoja una nueva oportunidad para empezar a sumar.