Competir. Esa es la palabra que Cuco Ziganda ha grabado a fuego en sus pupilos. Da igual el día, rival o el escenario. La cuestión es simple: la buena defensa, a la larga, acaba dando sus frutos en esto del fútbol. Y el Huesca lo sabe, que cosechó un trabajado punto en el Nuevo Los Cármenes ante un Granada que lo había ganado todo hasta ahora en dicho escenario.
Ponía Ziganda varios cambios respecto al partido ante el Leganés y daba entrada a Rubén Pulido, que debutó con la camiseta del Huesca, compartiendo eje de la defensa con el capitán Jorge Pulido. Se caía el joven Pablo Tomeo y Timor ocupaba su puesto en el centro del campo. Volvía Ratiu al lateral derecho y Juan Carlos y Kevin Carlos volvieron a repetir en la punta de lanza.
Cuajó una buena primera mitad el Huesca, que quizá fue de más a menos porque al Granada le costó desperezarse. A la primera media hora solo le faltó el gol. Y por ocasiones no fue, porque bien adelantarse el equipo altoaragonés. Nada más arrancar, en el minuto 3, llegó la primera. Cabaco saltó mal a la presión y no llegó a un balón que recibió Kevin Carlos, quien con un control orientado encaró la meta de Raúl Fernández. Su disparo se marchó muy alto.
Sin dar tiempo a respirar al Granada, de nuevo el Huesca embestía. Lo hizo con una acción casi calcada a la primera, con Kevin Carlos también de protagonista aunque esta vez encaró estando más pegado a banda. Cuando llegó a línea de fondo puso el pase de la muerte pero no encontró receptor. Doble oportunidad para un Huesca que enseñaba los dientes sin miramientos.
Insistió sobre todo por banda derecha, con un Gerard Valentín muy activo y participativo, que se fue a vestuarios siendo el mejor de los suyos. En el 25’ superó a Cabaco y puso un pase de la muerte para Kevin Carlos. El delantero cayó al suelo sin llegar a rematar, el balón rebotó en un defensa local y, con Kevin Carlos en el suelo, el balón pegó en el delantero y paró el envío que había cogido dirección portería.
Hasta entonces hubo muy poquito del Granada, que apenas propuso y se defendía en campo propio. La más clara para los locales fue en un libre directo desde la frontal del área, con un golpeo de Callejón que acabó con el balón estrellado en el travesaño de Andrés Fernández. A partir de ahí, el Granada mostró otra imagen mucho más digna. Rochina lo intentó desde la frontal del área grande con un disparo con pierna zurda tras un envío desde el costado derecho.
Ziganda sentó a Sielva en el descanso y dio entrada a Pablo Tomeo. Pasó muy poco en la segunda mitad, sobre todo en la primera media hora. Callejón se animó metiendo un pase de la muerte pero Andrés Fernández atrapó bien sin dar posibilidad al delantero de rematar.
Una doble prolongación de los Pulidos con la cabeza en un libre directo terminó con un balón estrellado en el travesaño tras un remate con la testa de Kanté. El balón, demasiado llovido, tocó en el larguero para lamento del delantero azulgrana, sabedor que en esa jugada podía haber estado la victoria.
Cabaco vio la roja por una dura entrada sobre Juan Carlos en los minutos finales y ambos conjuntos acabaron por guardar la ropa para sumar un punto. Ya son cinco porterías a cero en ocho fechas para el Huesca y su guardián, Andrés Fernández. Competir, competir y competir. Un punto de autor y en un partido “made in” Ziganda.
FICHA TÉCNICA
Granada CF: Raúl Fernández; Ricard, Víctor Díaz, Cabaco, Quini; Bodiger, Sergio Ruiz, Bryan Zaragoza (Puertas 62’); Uzuni (Jorge Molina 71’), Rochina (Melendo 62’) y Callejón (Miguel Rubio 93’).
SD Huesca: Andrés; Ratiu, Rubén Pulido, Jorge Pulido, Florián (Vilarrasa 73’); Timor (Kento 61’), Sielva (Tomeo 46’), Marc Mateu, Gerard Valentín (Soko 61’); Juan Carlos y Kevin Carlos (Kanté 61’).
Árbitro: De la Fuente Ramos. Amonestó con tarjeta amarilla a Sielva, Rubén Pulido, Tomeo, Timor y Jorge Pulido por el Huesca y a Sergio Ruiz por el Granada. Mostró tarjeta roja a Cabaco.
Goles: Sin goles
Incidencias: partido correspondiente a la jornada 8 del campeonato regular de la Liga Smartbank en el estadio Nuevo Los Cármenes de Granada. Antes del inicio del encuentro se guardó un minuto de silencio en memoria de las personas fallecidas durante un partido de fútbol en Indonesia.