Adrián Pereda sufre una fractura en su escápula derecha, producida tras un fuerte golpe durante el encuentro de la SD Huesca B frente al CD Ebro del pasado sábado.
El guardameta del filial, en dinámica del primer equipo, deberá llevar la zona inmovilizada para su correcta curación, por lo que será baja en las próximas semanas, aunque no será necesario su paso por quirófano. El pasado domingo ya acudió a la concentración del primer equipo en El Alcoraz con el brazo en cabestrillo.
El portero sufrió el fuerte golpe en la zona al impactar contra un rival en una salida dentro del área, en la primera parte. Pese a la aparatosa lesión, el jugador se mantuvo en el césped hasta el descanso, cuando fue sustituido, siendo trasladado después para su asistencia médica al Hospital Maz de Zaragoza, donde se procedió a inmovilizarle el brazo de manera inmediata. Las diferentes pruebas diagnósticas a las que ha sido sometido posteriormente han confirmado la fractura.
Desde los servicios médicos del club se trabaja ya en su plan de recuperación, cuyos plazos quedarán determinados por la propia evolución del jugador.