Han sido muchos días de esfuerzo pero todo ha merecido la pena. Nueve meses después de su grave lesión de rodilla, Rubén Pulido volvía a jugar un partido de fútbol. Lo hacía el pasado sábado en el amistoso ante Osasuna Promesas que terminaba con triunfo local por 2-1. Este lunes ha sido protagonista en la sala de prensa de la Base Aragonesa de Fútbol.
“Estoy muy contento de poder volver a competir y jugar con mis compañeros. Ahora tengo que intentar acumular los máximos minutos posibles hasta el inicio de la temporada y coger sensaciones y ritmo de competición”, afirmaba este lunes.
Una temporada que, tanto a nivel individual como colectivo, afronta “con muchas ganas”. “Tenemos muchas ganas de seguir evolucionando y mejorando y tenemos muchas ganas de que empiece la competición”, decía.
Y el defensa se marca un reto para este curso. “Quiero demostrar por lo que vine aquí. El primer año no salieron las cosas como queríamos y el año pasado pasó lo que pasó. Así que este año tengo muchas ganas de demostrar, dar un paso adelante y ayudar a mis compañeros”. Y añadía, “voy a luchar a tope para volver a ganarme la confianza del entrenador y a pelear como uno más”.
El defensa mira al futuro con optimismo, reconociendo que hubo momentos de la recuperación que se hicieron largos. “Al principio fue lo más duro porque pensaba que iba a pasar mucho más lento, pero al final con la ayuda de mis compañeros en el día a día y de todo el cuerpo técnico, se ha hecho más llevadero”.
Y explicaba que se lo ha tomado “con mucha calma”. “Lo importante en estas lesiones es cumplir los plazos y no querer ir más rápido de lo que debes”, afirmaba agradeciendo la ayuda de su entorno. “El día a día con los fisios y los doctores me ha ayudado mucho y con la ayuda también de los compañeros se ha llevado mejor. El final de temporada se hizo duro porque no puedes ayudar dentro del campo y te genera ansiedad y nervios”.
De todo se aprende y Pulido sabe que este tipo de lesión te puede pasar en este deporte y que “hay que tener la cabeza fría, afrontar lo que viene y, una vez recuperado, tirar para adelante. Que quede en una anécdota”.