La victoria balsámica del domingo ante la UD Ibiza abre una nueva semana cargada con todo el optimismo posible para la SD Huesca. Al final de esta, tocará una nueva cita en El Alcoraz, esta vez el rival será el Málaga CF (21'00 horas). Hasta entonces, seis sesiones de entrenamiento por delante, un día de descanso y jornada de doble sesión a mitad de semana para afrontar de la mejor manera posible el partido del domingo.
La plantilla ha realizado este lunes una sesión de recuperación para los jugadores que completaron más minutos ante el Ibiza, antes de la jornada de descanso del martes. Mientras, los efectivos con menos protagonismo en la tarde del domingo realizaron un partidillo conjunto con el Huesca B.
El miércoles será de doble sesión: por la mañana y por la tarde, ambas en el IES Pirámide. El jueves, entrenamiento vespertino a las 18'30 horas en El Alcoraz. El viernes, regreso de nuevo al Pirámide para completar la penúltima sesión de trabajo antes del sábado, día en el que tendrá lugar el último entrenamiento antes de recibir al conjunto de la Costa del Sol.
Esta puede ser una semana para que varias de las últimas incorporaciones que ha realizado Ángel Martín González se acaben de poner a todo y, quizás, puedan tener sus primeros minutos con la camiseta azulgran este domingo. Son los casos de José Ángel Carrillo y Rubén Pulido. Son las dos últimas piezas en llegar y los dos han pasado por un verano sin la actividad normal de la pretemporada en grupo. El míster, Cuco Ziganda, ya dejó claro en la previa del Ibiza que ninguno de los dos estaba preparado para ser titular y ahora habrá que ver si esta semana cogen el ritmo necesario para completar los primeros minutos con el Huesca, otra vez, ante el calor de la afición.