Siete ciclistas altoaragoneses afrontan desde este domingo día 20 de agosto el gran reto de la París-Brest-París. Todos coinciden en que es la cita por excelencia del cicloturismo mundial que se celebra cada cuatro años y cuya primera edición fue en 1891. Una aventura de 1.230 kilómetros “non stop”, con un desnivel positivo acumulado de casi 12.000 metros, que debe completarse para su homologación en un tiempo máximo de 90 horas. Son 6.810 los inscritos y 156 voluntarios. La internacionalización de esta singular prueba es más que evidente ya que tan solo el 23,5% de los inscritos son franceses. Y para las mujeres representa un esfuerzo todavía mayor si tenemos en cuenta que solo el 8% de las inscripciones son femeninas.
Silvia Ferrer, Francisco Javier Escanero, Anselmo Mur, Miguel Ramón Cored, Víctor Recaj y Daniel Chaverri -del Club Ciclista Oscense-, junto con José Luis Lera, del Club Ciclista Barbastro, son los siete altoaragoneses que van a participar en esta edición de la París-Brest-París. Pero para haber podido formalizar su inscripción ha sido necesario completar oficialmente las Brevets de 200, 300, 400 y 600 kilómetros.
Es una edición especial, también una de las que más representación provincial hay, porque se cumplen 40 años desde que Sigfredo Arrieta, entonces directivo del Club Ciclista Oscense, se convirtiera en el primer altoaragonés en realizar la prueba. Aquello sucedió en 1983. Cuatro años más tarde Miguel Ramón Cored fue el segundo y es quien ha completado en más ocasiones la PBP. Desde entonces ha sido un fijo de la prueba. Ha realizado las nueve últimas ediciones de forma consecutiva y afronta la décima. Es el segundo español que más veces la ha hecho y el 16 de todo el mundo, solo superado por Francesc Porta, que lleva once ya que en dos ocasiones no terminó, con lo cual se quedará a una de igualar al catalán. A esas cuatro décadas de presencia global oscense se une su particular “década” de presencia en la PBP.
SIGFREDO ARRIETA, EL PIONERO
“Para mí es lo más”, dice con emoción y nostalgia Sigfredo Arrieta, el pionero de los oscenses en hacer la París-Brest-París. “El artífice de aquello fue Eduardo Navarro. En un maratón ciclista en Burgos trabamos amistad con José Luis García, que nos habló de esta prueba y nos invitó a hacer las Brevets para poder clasificarnos. Se hacían en San Sebastián y Barcelona. Nosotros las hicimos en San Sebastián. Nos clasificamos los dos, pero Eduardo -presidente entonces del Club Ciclista Oscense- no pudo ir por temas laborales. Años más tarde sí que la hizo y en dos ocasiones”, comenta.
Arrieta dice que “la recuerdo con cariño, es una experiencia totalmente diferente y muy positiva. También muy dura. Pero para mí es lo más del ciclismo. Es emocionante ver a gente de 70 años haciendo el recorrido y compartir vivencias con todo tipo de cicloturistas durante esos cuatro días rodando por la carretera”.
Problemas de salud en el año 1985 le apartaron de la bici, aunque no del ciclismo, porque siempre ha tenido una vinculación muy especial con este mundillo en el que se ha granjeado el respeto, la admiración y el cariño de todos y siempre ha estado “allí” cuando se le ha necesitado.
MIGUEL RAMÓN, “EL HOMBRE DIEZ”
Afrontar la décima edición supone para Miguel Ramón Cored estar en el “candelero” de la PBP durante 40 años. Como cantar “las 40” en el guiñote o como ser el “hombre 10” del decatlón o como encadenar diez olimpíadas, que no es moco de pavo. Y además supone acercarse al Top-10 Mundial del mayor número de participaciones.
Recuerda con especial cariño aquella primera vez, en 1987, porque se estrenaba como presidente del Club Ciclista Oscense, “salvó” el Gran Premio San Lorenzo de perder el circuito del Coso -desde la Federación lo querían pasaportar al Polígono Sepes, lo cual hubiera supuesto una estocada mortal-, su hermano Jesús ganó aquel Gran Premio laurentino enrolado en las filas del CAI (y que fue un punto de inflexión para su salto a profesionales la temporada siguiente) y cuatro días después de las fiestas completó con éxito su primera PBP de las nueve seguidas que ha hecho.
“Siempre digo que he hecho ocho París-Brest-París y una Charles Terron”, comenta, ya que alude al ciclista francés que en la primera edición hizo el trayecto en 71 horas y 20 minutos y Cored se trazó el objetivo de bajar ese tiempo en el año 2011. Lo consiguió con un crono de 68 horas y 50 minutos. “Bajar eso supuso mucho esfuerzo, intensidad y concentración. Y me dio mucha moral estar acompañado por mi hermano Jesús con su mujer y su hijo y por mi mujer, Marisa”, rememora.
Terminar. Ese es el objetivo. “Tiene el mismo reconocimiento hacer esos 1.230 kilómetros en 90 horas, que es el tiempo máximo, que en cualquier otro registro”, afirma. Por la experiencia que atesora, “es una satisfacción y un orgullo poder estar en una prueba de este tipo. Entiendo que no es difícil hacerla porque el recorrido no es especialmente duro, aunque hay muchas lomas de entre dos y cinco kilómetros. Se podría decir que una tercera parte es preparación física y los otros dos tercios psicológica y mental. Aparecen momentos duros, cansancio, lesiones, situaciones de crisis… Si mentalmente no estás fuerte, es difícil acabar”, observa.
Y apostilla que “siempre he querido que existiera la llama de la París-Brest-París en el club. No me jacto de eso, como tampoco de haberla hecho nueve veces, pero es una satisfacción personal que entre unos y otros nos hayamos contagiado, de ahí el orgullo de ver cómo cada cuatro años hay gente que se anima a hacerla, sabiendo además que todos, del primero al último, tienen el mismo reconocimiento”.
HASTA EL MOMENTO, 22 CICLISTAS
Desde 1981 han sido 22 los ciclistas altoaragoneses que han completado la París-Brest-París, algunos en varias ocasiones, la mayoría del CC Oscense. Sigfredo Arrieta, Miguel Ramón, Luis Escanero (en seis ocasiones), Mario Garcés, Agustín Carmelo Benito, Enrique Ripoll, Eugenio Aznar (PC Edelweiss), Eduardo Navarro, David Ramos (CC Alcolea de Cinca), José Luis Lera (CC Barbastro, otro habitual que en 2003 fue el primer español), Mariano Estaún (PC Edelweiss), Emiliano Fuentes (PC Edelweiss), Adolfo Urzolla (PC Edelweiss), Julián Capistrós, Alejandro Abad, Carlos Gella, Justo Marcuello (CC Mayencos), Jesús Sánchez (PC Edelweiss), Anselmo Mur, Samuel Porcell, Jaime Navarro y Francisco Jordán (CC Barbastro).
También han completado las Brevets y han estado en la línea de salida, aunque sin hacerla entera, Diego Naval, Roberto Salillas, Carmelo Blasco y en dos oportunidades la única mujer, Carmen Pérez Fajardo, en los años 2007 y 2011, en las que tuvo que abandonar por diversos contratiempos.
Ahora la nómina de “finisher” puede completarse con los siete ciclistas anteriormente citados, de los cuales Anselmo Mur, Miguel Ramón y José Luis Lera ya tienen experiencia y las novedades son Francisco Javier Escario, Víctor Recaj, Daniel Chaverri y Silvia Ferrer, esta última con la posibilidad de ser la primera oscense en conseguirlo.
En el documento adjunto se pueden consultar todas las participaciones detalladas de los ciclistas altoaragoneses desde 1981. En la relación figuran también los siete que van a hacer la edición de 2023 con sus respectivos dorsales y cuyo seguimiento en vivo se puede hacer a través de la web parís-brest-paris.org