Descomunal ha sido el trabajo de la Federación Aragonesa de Gimnasia, con la presidenta, Máfer Lardiés a la cabeza. Sobresaliente es la nota que merece la organización y el trabajo de cuantos han participado en la organización de la Copa Base Iberdrola y la final de la Liga Iberdrola. Han funcionado como un reloj.
En plena recta final, y atenta a la conversación de Inés Bergua y Ana Pelaz, Máfer Lardiés tenía que sujetarse una emoción que le ha desbordado. "Ya no tengo palabras. Es un orgullo, una satisfacción, indescriptibles los sentimientos de tener aquí a Inés, al referente nacional de la gimnasia rítmia en Huesca, en su tierra, y contar con la seleccionadora y las entrenadoras del equipo nacional", ha dicho.
Un homenaje "muy mereecido, muy ganado y que le debía la ciudad de Huesca y Aragón por llevar el nombre de esta tierra, no solo por España sino también por el extranjero, que es algo que no lo puede decir cualquiera. A esas cosas hay que darles el valor que tienen y es muchísimo", ha afirmado Máfer Lardiés, que en la noche del sábado junto con familiares y amigos brindó una cena en la intimidad en la que hubo una "dulce" previa a Inés Bergua de la cita olímpica con una tarta hecha para la ocasión.