El grupo de Turismo por el Alto Aragón, de Peña Guara, comenzó la excursión, el pasado domingo, en el pueblo de Barbaruéns (1.140 metros), situado en la comarca de la Ribagorza y al que se accede por una estrecha y sinuosa carretera desde Seira.
A la entrada del pueblo, justo después de la fuente/abrevadero, tomamos el sendero GR15 que se dirige a Saravillo y que nosotros seguimos sólo hasta llegar al refugio de Armeña.
El primer tramo fue empinado, ascendiendo la senda a lo largo de unos 600 metros sobre la misma roca en forma de grandes losas. A ambos lados encontramos llamativos tapiales que delimitan huertos y campos.
Después de superado este repecho, la senda, ahora totalmente horizontal, se adentra en un tupido bosque. Debido a las recientes y abundantes lluvias encontramos un par de tramos de senda totalmente anegados, lo cual nos obligó a hacer piruetas sobre las piedras que sobresalían. Bonitas fotografías de las cascadas de los barrancos que vertían sobre la senda.
Llegados a las bordas de Bilsé alcanzamos una pista donde repusimos fuerzas dando cuenta de nuestros almuerzos, antes de ascender por un bonito bosque en el que los llamativos colores de las hayas, propios del otoño, contrastaban con los verde intenso de pinos y bojes. La pronunciada subida finalizó al alcanzar la pista que viene de Barbaruéns. La pista, luego camino y luego senda siguió ascendiendo por el interior del bosque, encontrándonos un par de interesantes miradores desde donde pudimos contemplar el fondo del agreste barranco de Bilsé. Abundantes fotografías del paisaje donde se podían apreciar los llamativos contrastes de colorido vistos ahora desde bastante altura.
Al salir del bosque la senda estaba algo descarnada, continuando la ascensión hasta llegar al Collado del Ibón (1.900 metros). Precioso mirador desde donde pudimos contemplar el ibón y el refugio de Armeña. Hacia el NO se apreciaban los picos de la cresta de Armeña (Punta Alta, Picollosa, Ribereta, Coronas, Espouy,...) y hacia el NE la extensa sierra de Chía. En la lejanía contrastaban las cimas ya nevadas de los picos de Eriste.
Descendimos hacia el ibón de Armeña y después de otra tanda de fotografías en el mismo, en pocos minutos llegamos al idílico, agreste, solitario y excelente mirador Refugio de Armeña (1860 metros). Después de una merecida comida mientras contemplamos el paisaje y de rellenar las cantimploras en la cercana fuente de Riancés (nacimiento del barranco de Bilsé), ascendimos una centena de metros con el fin de contemplar el comienzo del circo de Armeña así como el emblemático pico Cotiella.
El regreso a Barbaruéns los hicimos por el mismo itinerario que para la ida, excepto el tramo final que fue por pista a fin de evitar los tramos de senda anegados. En Barbaruéns pudimos visitar su coqueta iglesia y la reliquia que según la tradición corresponde al brazo de San Pedro.
Respecto a la meteorología, excelente día de sol con muy buena temperatura gracias a la cual la manga corta fue la prenda habitual la mayor parte del día.