Ficha técnica
Cinco inicial: Rubín de Celis 2, García 4, Adom 9, Lafuente 26 y Ndondo 7.
Baltasar 13, Yarnoz 9 y Malo 5.
Partido de máxima importancia el que ha enfrentado a Lobe Huesca la Magia frente al Mollet este sábado en el Palacio. Los de Cerdán necesitaban el triunfo para dejar encarrilada la salvación, mientras que los catalanes, colistas de la liga, necesitaban ganar para seguir en la pomada. Visto el escenario, estaba claro que la tensión y los nervios iban a estar presentes los 40 minutos.
El partido ha arrancado con ambos equipos al tran tran y jugando a un ritmo más favorable al Mollet que a los peñistas. Solo en un último arreón para acabar el primer cuarto, los oscenses han conseguido imponer su ritmo (19-15).
El segundo cuarto ha sido un calco del primero. La única diferencia es que han aparecido Baltasar por los locales y Sese por los visitantes para aportar algo de acierto exterior. El resto, sin acierto e invitando a que las defensas se cerrasen todavía más impidiendo las penetraciones.
Al descanso se se ha llegado con victoria parcial peñista (41-38) gracias a un Lafuente colosal y a un acertado Baltasar, a la espera de que Adom entrase en ritmo.
El resultado al descanso ha sido un milagro visto el arbitraje 'extraño' visto hoy en el Palacio. Seis tiros libres en los dos primeros cuartos para el Peñas, 20 para Mollet. Inexplicable.
Pero si parecía inexplicable el criterio arbitral de la primera mitad, el tercer cuarto ha arrancado con un espectáculo de los del sílbato deleznable, pitando técnicas por doquier a los locales y con una permisividad para los catalanes por la que es imposible no pensar mal.
A pesar de este atropello arbitral y gracias a un Palacio muy enchufado, los peñistas se fueron mandando al último cuarto (57-54).
Y en los últimos 10 minutos se ha impuesto el baloncesto. De la mano de Lafuente ejerciendo de líder absoluto y con un Baltasar enchufado desde el triple, Lobe Huesca la Magia consiguió una renta tranquila de 10 puntos (65-55 minuto 34).
A pesar de algún error final fruto de los nervios y de las ganas de la victoria, el triunfo no peligró gracias al desacierto de los catalanes y al dominio en el rebote defensivo de los nuestros.
Hay que destacar el redebut del oscense José Malo con los peñistas, fichaje cerrado sobre la bocina del cierre de mercado. A pesar de venir a hacer el papel de pívot suplente, su buena labor con 5 puntos y 8 rebotes ha propiciado que jugase hasta 22 minutos, incluyendo los últimos momentos en los que se decidía el choque.