El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, fue abordado la noche del viernes en el Coso Alto de Huesca, donde acudía a una fiesta, por los representantes sindicales de CCOO y UGT que se manifestaban para reclamar un convenio después de cinco años y mejoras salariales y laborales, que les han llevado a una huelga indefinida.
El jefe del ejecutivo se habría comprometido, afirman representantes de Comisiones, a mediar en el conflicto ante la patronal para intentar resolverlo, en la que ya era la quinta jornada de paro indefinido que continúa a pesar de los llamamientos institucionales y el último pronunciamiento de los empresarios.
Al igual que está sucediendo durante toda la semana, los huelguistas están llamando la atención de toda la sociedad con su presencia en diferentes actos, como la presentación del libro de Salvador Illa sobre la pandemia, además de la recogida de firmas. Alertan de las precarias condiciones de trabajo, con jornadas incompletas que redundan en nóminas de 800 euros, "algo impropio del siglo XXI". Esta noche de sábado, han concitado apoyos y rúbricas en la plaza de la Constitución, con motivo de la tradicional hoguera de San Vicente, el reparto de patatas y longaniza, y la actuación de la Comparsa de Gigantes y Cabezudos. Han realizado proclamas sobre el lustro sin convenio y también el hecho de que sus percepciones están por debajo del Salario Mínimo Interprofesional.