La Asociación cultural "Huesca cuna de San Lorenzo" ha reivindicado la figura del promotor e impulsor del actual modelo festivo en la capital altoaragonesa, Emilio Miravé Díez, quién fuera presidente de la Comisión de Fiestas, alcalde de Huesca y danzante, y lo ha hecho por tercer año consecutivo.
Han asistido su hija Lola Miravé, su yerno, Fernando Arguis y sus bisnietas Jara y Lucía, que de esta manera continúan honrando la memoria y el recuerdo de su bisabuelo. Ellas han depositado en su sepultura una maceta de albahaca decorada con las cintas de los danzantes y una pajarita, símbolos de Huesca.
El presidente de la asociación "Huesca cuna de San Lorenzo", Javier Monsón, ha posado en la lápida una pañoleta de la entidad cultural, que simboliza así su agradecimiento a quien convirtió la pañoleta en un símbolo de la ciudad y de las fiestas. Además, ha asegurado que la Junta de la Asociación, por unanimidad, había decidido nombrar a Emilio Miravé Díez socio de honor a título póstumo y agradeció que su familia aceptase este reconocimiento, incidiendo en seguir divulgando el origen de las fiestas tal y como las conocemos en la actualidad.
Este reconocimiento ha sido otorgado asimismo a la Agrupación de Danzantes de Huesca, a la escritora Teresa Ramón Palacio, al responsable de laicos de la basílica de San Lorenzo de Roma Fabio D'Ortona, al vicepresidente de la Cofradía del Santo Cáliz de Valencia José Francisco Ballester-Olmos y al caporal de la sociedad religiosa Primera Diablada Devotos de San Lorenzo de Tarapacá (Chile) Óscar San Ginés.